lunes, 30 de junio de 2014

La tercera es la vencida para Jorge Rondón


Reza el dicho que a la tercera es la vencida, y eso exactamente es lo que le sucedió a Jorge Rondón el pasado domingo.

Después de dos llamados en los que no pudo estrenarse con el equipo grande a comienzos de temporada, el lanzador reserva de los Tigres de Aragua, vio premiado su esfuerzo por el manager de los Cardenales de San Luis, Mike Matheny, y le permitió lanzar un episodio en lo que no permitió carreras.


Con su actuación el lanzador se convirtió en el criollo 313 en el mejor béisbol del mundo, y el onceavo que se estrena en 2014 después de Yangervis Solarte (Yankees), Luís Sardiñas (Rangers), Ender Inciarte (Cascabeles), Rougned Odor (Rangers), Jesús Aguilar (Indios), David Peralta (Cascabeles), Wilking Rodríguez (Reales), Eugenio Suárez (Tigres), Miguel Rojas (Dodgers) y Yohan Pino (Mellizos).

El lanzador de 26 años, solo regalo un boleto y tiro 15 lanzamientos, de los cuales nueve fueron en strike.

El guaireño tenía marca de 3-2 y 3.41 de efectividad en 27 presentaciones como relevista en el Memphis, filial Triple A de los pájaros rojos.

De acuerdo con el periodista Ignacio Serrano, el relevista era uno de seis nativos que, habiendo integrado un roster de Grandes Ligas, acumulando salario y tiempo de servicio, no había llegado a debutar.

La lista queda ahora circunscrita a los receptores José Yépez y Luís Oliveros, los lanzadores Rendy Espina y Omar Poveda, además del infielder Reegie Corona. Los últimos tres únicamente estuvieron en lista de incapacitados.

Rondón recibió su primer llamado el pasado 20 de abril y fue nuevamente convocado el pasado 13 de mayo, en ambas ocasiones no fue utilizado por Matheny, por lo que su estancia en el equipo grande fue de poco tiempo.

Aunque solo lanzo por emergencia, Rondón espera que su regreso a ligas menores no sea por mucho tiempo y sea reclamado para quedarse definitivamente.

Su caso es uno de los tantos que han engrosado la lista de ascenso en los cuales su nombre es poco conocido por la afición venezolana.

Allí han estado Donaldo Méndez, Francisco Rodríguez, Ronny Cedeño, Miguel Pérez,  Melvin Dorta, Iván Ochoa, Dioner Navarro, Anthony Ortega, Jeanmar Gómez, Eduardo Sánchez, Manuel Piña, Salvador Pérez, José Ortega, Hernán Pérez, Pedro Hernández, Rafael Ortega, Jesús Sucre, José Álvarez, David Martínez, Miguel González, Wilfredo Tovar, Wilking Rodríguez, Eugenio Suárez y David Peralta, todos ellos desconocidos para el béisbol venezolano, en los que si acaso tenían pocos turnos o pocos pitcheos en la LVBP, pero que gozaban de cierta fama con sus respectivas organizaciones en el norte.

Este año el debut de Wiking Rodríguez, Eugenio Suárez y David Peralta, abrió los ojos de la cantera que Venezuela posee y que pocas veces disfrutamos por las restricciones que algunas organizaciones imponen a los jugadores.

Si bien fueron 15 lanzamientos, Rondón dejo una grata impresión en San Luis, organización que aún no ha puesto trabas para que pueda actuar en el país, pero desde ya figura como una pieza de mucha valía para un equipo que no cuenta con un cuerpo de relevistas estable.


@beisboladentro

lunes, 16 de junio de 2014

Tony Gwynn el último gran sultán del swing dijo adiós


Tony Gwynn uno de los más prolíficos bateadores que ha dado las grandes ligas y miembro del Salón de la Fama,  falleció este lunes a los 54 años, victima de un cáncer facial, con el cual lucho en los últimos cinco años.

El ex jardinero de los Padres de San Diego, fue sometido a dos operaciones para atender el cáncer en su mejilla derecha entre agosto de 2010 y febrero de 2012. La segunda operación, sirvió para remover un nervio facial, presentó complicaciones debido a que éste se encontraba entrelazado con un tumor alojado dentro de la mejilla.

Los médicos le hicieron un injerto con nervios del cuello para que eventualmente pudiera recuperar el movimiento facial.

Gwynn le fue diagnosticada la enfermedad en 2009, cuando le retiraron un tumor maligno de su mejilla derecha. En ese entonces, señalo que el cáncer en la glándula salival fue por mascar tabaco, un hábito común en los peloteros de esa época.

Lamentablemente, y a pesar de la recuperación, Gwynn perdería la batalla luchando como lo hizo en el terreno de juego durante los últimos treinta años.

Gwynn quien dejó varios registros en su paso por las Grandes Ligas, será recordado por algunos de ellos:

Ocho coronas de bateo en la Liga Nacional, igualado con Honus Wagner. Bateó sobre los 300 en 19 de sus veinte temporadas en las mayores, todas con los Padres de San Diego. Se retiró con un promedio vitalicio de 338, el más alto desde que Ted Williams se retirara con los Medias Rojas de Boston en 1960 luciendo promedio de 344. Gwynn disparó además 3.141 imparables, de los cuales 543 fueron dobles, 135 jonrones y 85 triples. Además de tener cinco campañas con 200 o más imparables.

Asistió a 15 Juegos de Estrellas, ganó siete Bates de Plata y cuatro Guantes de Oro, demostrando que a pesar de su peso fue más que un insigne bateador.
En el portal baseball-reference le dedicaron esta fotografía

Gwynn siempre fue un perfeccionista del bateo, era estudioso de cada uno de sus turnos y fue un duro rival por la corona de bateo.

Una de las experiencias que más recuerdo fue la de 1993, cuando Andrés Galarraga le arrebató lo que podía ser en ese entonces su quinto título de bateo.

Esa temporada Galarraga comandaba a los bateadores del viejo circuito con un promedio superior a los 360, cuando una lesión a mediados de julio lo saco de competencia durante un mes. Al regresar se encontró con que ya no figuraba entre los líderes de bateo y que Tony Gwynn era quien lideraba dicho departamento.

Galarraga emprendió así una de las luchas más recordadas en la historia del béisbol y no sólo alcanzo los turnos legales sino que se consolido con un 373 de promedio, pulverizando los 358 que Gwynn obtuvo, para dejarlo en el segundo lugar.

En ese entonces, y tras haber ganado su único cetro de bateo, Galarraga afirmó lo difícil que fue luchar contra las adversidades y con un Tony Gwynn que lo acechaba en cada turno al bate, creyendo que no obtendría los turnos necesarios para arrebatarle la corona al jardinero de los Padres de San Diego.

Pero, la lucha más memorable que Gwynn tuvo en su carrera ocurrió al año siguiente, cuando una huelga de peloteros impidió al jardinero convertirse en el primer jugador desde Ted Williams en terminar la temporada con un promedio superior a los 400.

Gwynn, no logró el cometido y terminó la abrupta campaña con 394 de promedio a seis de la mágica cifra.

El retiro de Gwynn  de los diamantes ocurrió en 2001, después de dos años aquejado por lesiones, siendo homenajeado en el clásico de mitad de temporada junto a Cal Ripken Jr, figura con quien logró la inmortalidad en 2007.

Gwynn no se alejo de los terrenos tras su retiro.

Fue entrenador en su alma máter, la Universidad de San Diego State, con quien estuvo hasta marzo del presente año, a raíz de las complicaciones con el cáncer.

Bud Selig, comisionado de las mayores afirmó la constancia y dedicación que Gwynn sembró en el béisbol.

“Durante más de 30 años Tony Gwynn fue una fuente de buena voluntad en el deporte nacional, lo extrañaremos profundamente por mucha gente a la que conmovió”.

Cuando se hable de bateo y de perfección es imposible no nombrar a Gwynn, el último gran bateador que hubo en las Grandes Ligas.

289

Fue el average de Tony Gwynn en su temporada de novato en 1981, fue la única vez en que no batearía sobre los 300 en su carrera de veinte temporadas en las Grandes Ligas.

@beisboladentro

La Copa del Mundo vs las Grandes Ligas


“Ningún deporte genera más emociones que el béisbol”, fue el tuit que coloco el pasado viernes Ernesto Jerez, periodista de la cadena deportiva ESPN.

El tuit muy original sin duda, responde a la atención mediática que generó el inicio de la Copa del Mundo, Brasil 2014, evento que reúne a las mejores selecciones del planeta y en el cual se dan cita los mejores exponentes de este deporte.

Aunque Jerez no quiso crear polémicas con el asunto, es cierto que el béisbol genera emociones, pero no como las que se presentan en la Copa del Mundo, donde las sorpresas, la mercadotecnia y el arraigo de millones de seguidores han mantenido a este evento deportivo como uno de los más importantes del planeta.

A diferencia del béisbol, no todos los años puedes disfrutar de ver a Cristiano Ronaldo vestido con el uniforme de Portugal, o ver las genialidades de Lionel Messi con Argentina. Incluso en el béisbol jamás veremos la competencia entre las marcas deportivas como Adidas, Nike, Puma, entre otras. O la cantidad de sponsors publicitarios, que quizás el superbowl pueda igualar.

El béisbol no ha tenido un arraigo como el fútbol lo ha hecho en continentes como Europa, Asía y Oceanía. Incluso en Sudamérica nueve de los diez países que pertenecen a la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL), tienen al fútbol como su principal deporte, siendo Venezuela la excepción donde el béisbol prevalece por encima del fútbol.

El fútbol ha demostrado porque es el deporte rey
Quizás México sea una de esas excepciones donde el fútbol y el béisbol tienen el mismo sitial, dado la pasión que desborda los mexicanos por el deporte.

En los Estados Unidos el béisbol es el deporte con más seguidores, seguido del fútbol americano, el baloncesto y muy atrás el soccer, como llaman ellos al fútbol. Quizás Jerez por vivir en suelo norteamericano (nació en República Dominicana), aprecie más esa emoción en el béisbol, pero es imposible negar la atención que genera el Campeonato de Fútbol, que opaca a otras disciplinas.

Al igual que Jerez el béisbol es uno de mis deportes favoritos, de allí a que surja este blog, pero como todo fanático, me dejo llevar por las emociones que genera el torneo en Brasil, hasta tal punto que cree una página web sobre el mismo, por algo el fútbol es llamado el deporte rey, y estaremos sucumbidos a él durante el mes de competición.


@beisboladentro

sábado, 7 de junio de 2014

El sorprendente ascenso de Wilking Rodríguez

Hace apenas dos temporadas, Wilking Rodríguez era un despojo. ¿Un pitcher con 21 años de edad, operado del hombro? ¿Un joven que apenas había lanzado un puñado de encuentros en clase A media, todavía con futuro en el beisbol profesional?

No hay peor operación para un serpentinero que las intervenciones en el hombro. La reconstrucción del codo termina a menudo con rectas más veloces y mejores resultados, un año después. ¿El hombro? Es impredecible. Con frecuencia, de pronóstico reservado.

Esa fue la razón por la que Richard Castro, supervisor de scouts de los Reales en Venezuela, tuvo que hacer tantas diligencias, realizar entrevistas y redactar informes, hasta finalmente asegurar la firma de Rodríguez, el nuevo bigleaguer de la expedición nacional.

“Cuando tomamos la decisión de firmarlo”, explica Castro, “todavía teníamos mucha preocupación. Prácticamente perdió dos años por la operación”..


Rodríguez tenía una razón rotunda, para aspirar a llegar a las mayores, a pesar de haberse descarrilado. Por eso, se declaró agente libre, al cumplir seis años con los Rays y no ser incluido en el roster de  40. Y por eso hoy forma parte del bullpen de los monarcas.

“Se ha recuperado tan bien, que lanza a 101 millas por hora”, exclama Castro. “Es un brazo con potencia”.

El derecho de Puerto Cabello es una de las historias más inesperadas y felices entre los más de 300 compatriotas que al menos han tomado un café en las grandes ligas, desde el Patón Carrasquel hasta Miguel Rojas.

Nunca lanzó con el Magallanes, su equipo en la LVBP, antes de este llamado. Casi ningún aficionado sabía de su existencia, camuflado entre el millar y tantos jugadores del patio que tienen contratos con el beisbol internacional.

Ni siquiera se mostró en los juegos de exhibición de marzo pasado, a pesar de que fue llevado al spring training por Kansas City. Pero Castro y su equipo veían posible que ocurriera este golpe favorable, esta noticia que a los demás tomó por sorpresa.

“Kansas City le está dando muchas oportunidades a los jóvenes”, explica el buscador de talentos.

Es necesario haber estado cerca de Rodríguez, sin embargo, para tener tanta certeza.

El carabobeño nunca había lanzado más allá de clase A avanzada, antes de esta campaña. Incluso, su experiencia en esa categoría se limitaba a 34.0 episodios en 2002, en medio de las dolencias. Los 9.0 episodios que trabajó, apenas, fueron en categoría de novatos, mientras se rehabilitaba.

“Pero la mayoría de los scouts lo tenían visto desde el año pasado”, cuenta Castro. “Saliendo de rehabilitación, ya estaba tirando a 95 millas por hora”.

El alto mando monárquico planteó serias reservas. El equipo de scouteo en Venezuela debió visitar al serpentinero, ya declarado agente libre, y evaluar sus condiciones, medir su velocidad, constatar su estado de salud, averiguar sobre su vida y personalidad.

“Hasta contacté a la gente de Tampa, para saber cómo había sido su comportamiento”, recuerda Castro. “Fueron muchas cosas, que no necesariamente tienen que ver con beisbol”.

La certeza que tenían aquí no era compartida en el norte.  

“Los Reales vieron nuestros reportes y decidieron darle la oportunidad”, continúa Castro. “Es un trabajo de hormiga, donde lo más importante era saber cómo estaba su hombro. Tuvimos que conversar con mucha gente. Estamos muy contentos con la decisión que se tomó”.

¿Tanto esfuerzo por un desconocido, a quien los problemas físicos parecían haber descarrilado?

Puede que todo se debiera a que, como sazón a esa recta de 100 millas por hora, Rodríguez tenía un carácter especial.

“El aspecto mental es su mayor característica”, asegura Castro. “Tiene una actitud excelente. Por eso está allí”.

Meses después de una firma que rubricó sin haber todavía conocido la acción en doble A; dos años luego de una operación en el hombro que puso en riesgo su carrera y a tan poco tiempo de haberse declarado en libertad, el apagafuegos suelta el brazo en el bullpen del Kauffman Stadium.

“Sé que Marty DeMerritt debe estar muy contento”, sonríe Castro. “Me habló como una hora de él, cuando lo tomamos. Trabajaron juntos con los Rays. Creo que no hay otra persona que le haya hecho mayor seguimiento en las menores. ‘Buena firma, buen pelotero. Seguro les va a ayudar’, me decía todo el tiempo”.

DeMerritt no se equivocó, como tampoco se equivocó el hombre que convenció a Kansas City de darle una oportunidad a este porteño de recta poderosa y sorprendente carrera.

Sólo necesitó 11.0 innings en las menores de los Reales para demostrar que estaba listo. O al menos eso pensó Dayton Moore, el gerente general de la divisa.

El recluta se ganó a pulso el derecho de ser tenido por prospecto.

Tomado de Ignacio Serrano
www.elemergente.com

El viacrucis de Johan Santana




Los sueños y anhelos de ver a Johan Santana lanzar nuevamente en las Grandes Ligas deberán esperar para la próxima temporada, tras conocerse que el zurdo venezolano se perderá la campaña, al recibir un pelotazo en el tendón de Aquiles de su pierna derecha.

La lesión se produjo luego de que el tovareño recibiera un fuerte pelotazo mientras lanzaba en lo que sería su última salida en el spring training extendido con los Orioles de Baltimore, antes de unirse a una de las filiales de los oropéndolas. 

Dan Duquette, vicepresidente de operaciones de los Orioles, confirmó la noticia tras conocer los resultados de la resonancia magnética. 


La noticia frustró las intenciones de Santana quien esperaba lanzar con los oropéndolas a finales del presente mes, tras recuperarse de una cirugía en el hombro izquierdo efectuada el año pasado.

Camino difícil
Santana tenía previsto incorporarse a las mayores el 19 de junio para realizar su primera presentación desde el 17 de agosto de 2012. Sin embargo, la nueva lesión lo alejará de los terrenos durante seis meses.

El merideño venia de cumplir un cronograma de trabajo con los oropéndolas, tras haber lanzado cuatro aperturas en el spring training extendido donde su recta alcanzo las 90 mph.
Baltimore compró su contrato y lo coloco en la lista de lesionados por 15 días a fin de que el venezolano realizara dos aperturas más en ligas menores para debutar ante los Rayas de Tampa Bay en San Petersburgo.

Duquette destacó lo bien que estaba lanzando Santana en sus últimas presentaciones -el 27 de mayo trabajó 4.1 innings en los que toleró seis hits, dos carreras, no dio bases por bolas y abanicó a ocho rivales-. "Su velocidad estaba de vuelta y el slider también estaba funcionando", comentó el directivo.

"Nos gustaba mucho poder contar con su liderazgo y nivel en la organización", dijo Duquette. "Invertimos en su rehabilitación, en su salario... No pensábamos cambiar peloteros. A veces tienes todo planeado pero las cosas sencillamente no funcionan"

El manager del equipo, Buck Showalter, lamentó las malas noticias.

"No teníamos la certeza de que con nosotros iba a lanzar bien, pero de alguna forma iba a venir a ayudarnos", dijo el piloto. "Me siento terrible por él, peor de cómo me siento por nosotros que ahora tenemos serios problemas con nuestra rotación. Trabajó muy duro para regresar de una cirugía de la que no mucha gente regresa y estaba en un muy buen lugar".

Showalter había señalado la posibilidad de trabajar con una rotación de seis hombres para incluir al venezolano, y así tener descanso adicional tras su segunda operación en la capsula anterior del hombro izquierdo.

Santana, quien tiene marca de 139 victorias y 78 derrotas, está a 12 ponches de convertirse en el primer lanzador venezolano en superar los 2.000 abanicados.

Su última apertura fue el 17 de agosto de 2012, cuando cayó ante los Nacionales de Washington. Mientras su último triunfo fue el 30 de junio de ese año ante los Dodgers de Los Ángeles.

@beisboladentro

Novatos criollos toman por asalto las Grandes Ligas




Una nueva camada de estrellas en ascenso ha decidido que 2014 será el año de su consagración en las Grandes Ligas. Nueve venezolanos han debutado en el mejor béisbol del mundo y han demostrado que pueden ser regulares en corto tiempo.

La marca lograda igualo lo hecho en 2008, cuando en los primeros tres meses de campaña nueve criollos se habían estrenado de un total de 18 que lo hicieron ese año, cuando se estableció el récord de más debutantes en un año.

Yangervis Solarte, Luís Sardiñas, Ender Inciarte, Roudned Odor, Jesús Aguilar, David Peralta, Wilking Rodríguez, Eugenio Suárez y Miguel Rojas, son los integrantes de la clase 2014 hasta los momentos.

Algunos son conocidos por la afición venezolana, otros aún no han hecho su estreno en la liga venezolana. Del grupo solo Aguilar fue devuelto a ligas menores, mientras que Solarte y Odor han aprovechado las oportunidades dadas por Yankees y Rangers, quienes lo colocaron como regulares en sus alineaciones.

Otro criollo que no pudo estrenarse fue Jorge Rondón, quien fue promovido en dos ocasiones por los Cardenales de San Luís, sin tener el honor de jugar un encuentro.

Estrellas en ascenso
Yangervis Solarte
Solarte fue el primero en estrenarse en las mayores con la etiqueta 301 en su haber. Los Yankees de Nueva York fueron el conjunto que le brindo la oportunidad de quedarse como utility, supero en el último corte a Eduardo Núñez, quien había tenido dicho puesto en los últimos tres años.

La lesión de Mark Teixeira en la segunda semana de acción, motivo al mánager de los mulos, Joe Girardi, a darle la responsabilidad al venezolano para que fuera regular de la antesala, mientras que Kelly Johnson era mudado a la inicial.

El resultado es bien conocido por todos. Solarte se soltó a batear y estuvo durante una parte de la temporada liderando a los bateadores. Es actualmente el líder en hits del equipo, situación que obligó a Girardi a mantenerlo en la alineación tras el retorno de Teixeira y mandando al banco a Johnson.

Ha ganado elogios de sus compañeros y de una de las aficiones más exigentes de este deporte.

Sardiñas era una de las gemas más valiosas que tenía los Rangers de Texas en su sistema de ligas menores. El campocorto tenía por delante el escollo de Elvis Andrus y Jurickson Profar para cumplir su sueño de ser grandeliga.

La lesión de Profar más el pobre desempeño de Donnie Murphy y Josh Wilson, motivo a la gerencia a acelerar su llamado, a pesar de ser usado en la segunda y el campocorto, Sardiñas ha demostrado que no tiene nada que hacer en ligas menores y actualmente aunque no juega regularmente, se mantiene en el equipo grande.

El año pasado Ender Inciarte fue tomado por medio del draft de regla V por Filadelfia y se pensó en que su estreno estaba cantado. Pero apenas inicio la temporada Filadelfia optó por devolver a Arizona al zuliano y con ello su estreno en el big show fue pospuesto un año después, cuando los desérticos llamaron desde ligas menores al jardinero reserva de las Águilas del Zulia.

El estreno de Inciarte vino acompañado de sufrimiento ya que su vuelo se retrasó y arribó al estadio alrededor de media hora después de haber finalizado el encuentro por lo que se estrenó al día siguiente.

El zuliano ha ganado elogios por su defensa en el jardín central.

Si Sardiñas es una de las gemas más preciadas en Texas, Rougned Odor no se queda atrás, el camarero también recibió su llamado a las mayores y de inmediato se ha hecho sentir con el bate y con el guante.
 
Rougned Odor
En este instante Odor es el segunda base regular del equipo y a sus 20 años está demostrando que puede hacer el trabajo. Texas ha estudiado la posibilidad de mover a Profar a la antesala – cuando este se recupere - para que el venezolano pueda ver acción. En el peor de los casos se ha rumoreado la posibilidad de salir de Profar y de Andrus para que Odor y Sardiñas sean la combinación de dobleplays en el equipo grande.

Si no hubiera sido por la campaña de Alex Cabrera, Jesús Aguilar, hubiera sido el MVP de la temporada venezolana y hubiera celebrado dicha designación con su estreno en las mayores con los Indios de Cleveland.

Aunque su estadía fue de tres días, Aguilar dejo constancia de lo que puede hacer a la ofensiva en un equipo que está en reconstrucción y con un mánager como Terry Francona que sabe sacar provecho de los novatos.

Es probable que en septiembre retorne a las mayores cuando se expandan los rosters.

Las sorpresas
David Peralta sorprendió a propios y extraños cuando los Cascabeles de Arizona lo llamaron desde Doble A. El jardinero perteneciente a los Bravos de Margarita, no solo se convirtió en el 308 en la histórica lista sino que su debut produjo un hito que solo se ha conseguido en una ocasión.

Arizona alineó a tres jardineros venezolanos en un encuentro por segunda ocasión en la historia de las mayores. Peralta que bateó de 4-2 en su estreno, jugó en el jardín izquierdo, Inciarte en el central y Gerardo Parra en el derecho.

Además del trío de jardineros Martín Prado y Miguel Montero actuaron en el encuentro para colocar cinco criollos en acción.

En 2009, los Marineros de Seattle alinearon a tres jardineros criollos en un encuentro cuando Ronny Cedeño, Franklin Gutiérrez y Endy Chávez lo hicieron por primera vez.

Peralta fue una de las sorpresas en esta temporada, pues nadie aposto por su ascenso.

Y si de apuestas se trata, Wilking Rodríguez fue una de ellas. 
Wilking Rodríguez

El lanzador que aún no se ha estrenado con los Navegantes del Magallanes, logró hacer el grado con los Reales de Kansas, sacando por la vía rápida un episodio.

Hace apenas dos temporadas, Rodríguez era un despojo de 21 años que fue operado del hombre y tenía apenas un puñado de encuentros en Clase A media. Ni siquiera se mostró en los juegos de exhibición de marzo pasado, por lo cual muchos se sorprendieron con la noticia de este debut.

Es el décimo primer venezolano que se estrena primero en las mayores que en LVBP. La lista la integran Francisco Rodríguez (2002), Andrés Eloy Blanco (2004), Dioner Navarro (2004), Ronny Cedeño (2005), Jhoulys Chacín (2009), Jeanmar Gómez (2010), Salvador Pérez (2011), Héctor Sánchez (2011), Wilmer Font (2012) y Pedro Rodríguez (2012).

El nombre de Eugenio Suarez sonó a principios de temporada para ser el sustituto de Julio Iglesias en los Tigres de Detroit. Pero los felinos contrataron a Alex González y Andrew Romine para solucionar el puesto de campocorto.

Tres meses después la historia es otra. Iglesias se perderá la campaña, González no está con el equipo y Romine no ha tenido una actuación sobresaliente, por lo que Detroit no lo dudo y llamo al joven torpedero para convertirse en el venezolano 310 en ver acción en las mayores.

El reserva de los Leones del Caracas ha ganado confianza y se vislumbra como el dueño de la posición seis, marca de fábrica del país.

Cierra la lista de debutantes “provisionalmente” Miguel Rojas, quien hizo su estreno con los Dodgers de Los Ángeles.

El camarero y campocorto estuvo luchando por un cupo en marzo, junto a varios peloteros y a pesar de no hacer el grado, dejo grata impresión en el cuerpo técnico que no dudo en llamarlo desde Triple A.

Rojas espera aprovechar al máximo su experiencia en un equipo con aspiraciones campeoniles.

La lista por los momentos está detenida, pero hay otros nombres que esperan su llamado y si sigue el talento emergente la cifra de 18 debutantes en un año pudiera caer en 2014.

@beisboladentro