sábado, 25 de julio de 2015

Cooperstown recibe a nuevos inmortales


Finalmente el día llegó…

Este domingo 26 de julio, Craig Biggio, Randy Johnson, Pedro Martínez y John Smoltz serán formalmente entronizados en el Salón de la Fama de Cooperstown.

La investidura tendrá lugar en los jardines del Centro de Deportes Clark, que se encuentra en la parte baja de la avenida Susquehanna, a sólo una milla del Museo de la Fama, donde reposan las placas de los peloteros exaltados por la Asociación de Escritores de Béisbol de América (BBWAA), así como objetos de jugadores que han conseguido alguna hazaña.

La pequeña localidad de Cooperstown, ubicado en el condado de Otsego en el estado de Nueva York, se preparó para un fin de semana con aroma a béisbol, miles de fanáticos han colmado las calles de esta pequeña villa para compartir con otras figuras y amigos, el reconocimiento que el béisbol ha hecho con los nuevos exaltados.

La ceremonia comenzará a la una de la tarde y contará con la presencia de 49 miembros de Cooperstown, incluyendo cuatro latinoamericanos presentes (Roberto Alomar, Luis Aparicio, Juan Marichal y Tany Pérez), quienes presenciarán los discursos de Biggio, Martínez, Smoltz y Johnson.

Se espera que la ceremonia tenga un récord de asistencia, debido a que la carrera de los peloteros exaltados concluyera hace menos de diez años, por lo que serán varios los fanáticos que asistan a apoyar a sus figuras, sobre todo de la República Dominicana, donde Martínez es oriundo.

Smoltz, Johnson y Martínez, se retiraron en 2009, mientras que Biggio lo hizo en 2007.

El récord de asistencia para la ceremonia de exaltación de Cooperstown fue establecido en 2007, cuando más de 80 mil personas vitorearon a Cal Ripken Jr y Tony Gwynn; alrededor de 50.000 acudieron al llamado de 1999, cuando correspondió el turno a Nolan Ryan, George Brett, Robin Yount y el puertorriqueño Orlando Cepeda, mientras que un estimado de 48.000 asistieron el año pasado a la ceremonia de Greg Maddux, Tom Glavine, Frank Thomas y los managers Joe Torre, Bobby Cox y Tony La Russa.

Otra gran asistencia ocurrió en 1995, cuando 40 mil personas presenciaron la exaltación de Mike Schmidt y Richie Ashburn.

Ellos son los exaltados:

Randy Johnson: 534 votos de 549 posibles para 97.3%
22 temporadas: 1988-2009
En sus inicios Johnson lucho con el descontrol de sus
lanzamientos, intimidando a sus oponentes

10 Juegos de Estrellas, cinco premios Cy Young, 303 victorias, 4.875 abanicados (2do de todos los tiempos), 10.6 ponches por cada nueve entradas lanzadas (líder de todos los tiempos). Lanzó para los Expos de Montreal, Marineros de Seattle, Astros de Houston, Cascabeles de Arizona, Yankees de Nueva York y Gigantes de San Francisco.

Randy Johnson era un atleta de élite que utilizó su altura a su favor, tanto en el béisbol como el baloncesto. Rechazó los Bravos de Atlanta después de que lo seleccionaran cuarto en la ronda de 1982, por lo que optó a continuar su beca para béisbol y baloncesto en la Universidad del Sur de California

Comenzó a concentrarse únicamente en el béisbol tras su segundo año y fue seleccionado por los Expos en la segunda ronda en 1985. Esta vez, Johnson se convirtió en profesional.

Los problemas de control que plagaron su carrera como colegial emergieron en ligas menores, pero con una recta en 97 mph, su condición de prospecto floreció rápidamente. En 1988, asciende con los Expos y es cambiado a mitad de la temporada de 1989 a los Marineros de Seattle, pese al descontrol de sus lanzamientos y su tamaño en el montículo, intimidaba a los bateadores cada vez que lanzaba, hasta que rozo la gloria el 2 de junio de 1990, cuando lanzó un juego sin hits contra los Tigres de Detroit.

En agosto de 1992, Johnson buscó consejos del lanzador Nolan Ryan, que estaba lanzando su última temporada con los Rangers de Texas, y este le sugirió hacer ajustes al momento de lanzar. En septiembre de ese año, ambos lanzadores se enfrentaron y Johnson lanzó 160 pitcheos en ocho entradas, incluido 18 ponches para que Seattle ganara ese juego 3 a 2.

"Le dije a Randy que podría ser el lanzador más dominante del béisbol si se enfoca en trabajar en su juego", dijo Ryan en 1992.  

En 1993, dejó registro de 19-8, liderando la Liga Americana en ponches con 308 y finalizando segundo en la votación al premio Cy Young. Al año siguiente, la huelga producida en agosto, le permitió a Johnson conseguir su segundo liderato consecutivo en abanicados con 204, terminando con marca de 13-6. En 1995 dejaría marca de 18-2 y 294 abanicados, liderando la liga con 2.48 de efectividad, suficientes para ganar el premio Cy Young.

En 1996 se perdió la mayor parte de la temporada al someterse a una cirugía de espalda, pero se recuperó en 1997 para dejar marca de 20-4 con 291 abanicados. Sería traspasado a los Astros de Houston en julio de 1998 y dejaría marca de 10-1 con 1.28 de efectividad en 11 salidas, ayudando a Houston a llegar a la postemporada.

Con 35 años, se convirtió en agente libre y firmó con los Cascabeles de Arizona por cuatro años; de 1999 a 2002, Johnson capturó cuatro premios consecutivos Cy Young, tres títulos de efectividad y poncho a 1.417 bateadores (cuatro lideratos consecutivos en ese departamento 364, 347, 372 y 334 ponches respectivamente).

Fue pieza vital en el título de Arizona frente a los Yankees de Nueva York en la Serie Mundial de 2001, cuando dejó marca de 3-0 en ese evento y compartió el MVP con Curt Schilling.

Su carrera en Arizona concluyó en 2004 y llegaría a los Yankees en 2005 con 41 años de edad.

Ganaría 34 partidos en dos temporadas con los del Bronx antes de regresar a los Cascabeles por dos campañas más. A los 45 años lanzaría su última campaña en 2009 con San Francisco, donde ganaría su juego 300.

En 22 temporadas, fue líder en abanicados en nueve ocasiones, ganó cuatro títulos de efectividad, obtuvo 100 juegos completos con 37 blanqueos. Sólo Warren Spahn, Steve Carlton, Eddie Plank y Tom Glavine, tienen más partidos ganados que Johnson entre los lanzadores zurdos.

Johnson es dueño de seis de las 33 temporadas registradas con 300 ponches en las mayores. El único que tiene similar registro al espigado zurdo es Nolan Ryan.

Pedro Martínez: 500 votos de 549 posibles para 91.1%
18 temporadas: 1992-2009
Debido a su cotización tras ganar el
premio  Cy Young Martínez fue
cambiado a Boston

8 Juegos de Estrellas, tres premios Cy Young, 219 victorias, 3.154 abanicados, 10.0 ponches por cada nueve entradas lanzadas (3° de todos los tiempos). Lanzó para Dodgers de Los Ángeles, Expos de Montreal, Medias Rojas de Boston, Mets de Nueva York y Filis de Filadelfia.

El talento de Pedro Martínez y de su hermano Ramón llamo la atención de los cazatalentos. Mientras su hermano se convertía en estrella rápidamente, Pedro fue considerado uno de los mejores prospectos de la organización. En 1993 estuvo en el bullpen de los Dodgers registrando marca de 10-5 en 65 partidos con 119 abanicados en 107 entradas de labor. Su actuación le abrió los ojos a los Expos de Montreal que lo adquieren por Delino DeShields en noviembre de 1993. En las siguientes cuatro temporadas, ganó 55 y perdió 33. Asistió a su primer Juego de Estrellas en 1996 y en 1997 obtuvo su primer premio Cy Young al dejar registro de 17-8 con 1.90 de efectividad, 13 juegos completos y 305 abanicados.

Su recta de 97 millas por hora, combinada con cambio de velocidad hizo a Martínez casi imbateable.

"Cada bola rápida duele, duele mucho", dijo Martínez al New York Post en 2005. "Imagínese lanzar una pelota a 90 millas por hora, una y otra vez. La gente no sabe que cada vez que se trata de lanzar una bola, se rompen los vasos sanguíneos. Es por eso que tenemos nuestros hielos en los brazos".

Tras ganar el Cy Young y a sabiendas de que su valor aumentaba considerablemente, Martínez es cambiado a los Medias Rojas, convirtiéndose en los siguientes siete años en uno de los lanzadores más dominantes del béisbol.

Dejó registro de 19-7 en 1998 y terminó segundo en la votación del premio Cy Young, al año siguiente se llevaría el premio con 23-4 y efectividad de 2.07 además de liderar la liga en ponches con 313, ganando la Triple Corona de Pitcheo. Se convirtió ese año en el octavo lanzador en tener dos temporadas de 300 ponches y estableció una marca de 13.2 ponches por cada nueve entradas lanzadas, para finalizar segundo en la premiación al Jugador Más Valioso.

En 2000, Martínez dejó marca de 18-6 con 1.74 de efectividad y 284 abanicados para sumar su tercer Cy Young en los últimos cuatro años. Una lesión en el hombro lo marginó en 2001, regresando al año siguiente con registro de 20-4, siendo líder en efectividad (2.26) y abanicados (239), para finalizar segundo en la votación al Cy Young.

Es el primer lanzador que registra un WHIP de 0.92 con un porcentaje de triunfos de 833, que no gana el Cy Young que recayó en Barry Zito de Oakland que dejó marca de 23-5 con 2.75 de efectividad.

Después de liderar la Liga Americana de nuevo en WHIP, efectividad y porcentaje de victorias en 2003 con registro de 14-4, Martínez comenzó a mostrar desgaste en 2004 - una efectividad de 3.90 mientras dejaba 16-9 como registro, aún así terminó cuarto en la votación del Cy Young - y ayudó al final los Medias Rojas a acabar con una frustración de 86 años cuando capturaron el título de la Serie Mundial por primera vez desde 1918.

Firmó contrato con los Mets de Nueva York al siguiente año y su marca quedó en 15-8 con 2.82 de efectividad.

Los siguientes tres años estuvieron plagados de lesiones, consiguiendo su abanicado 3.000 en 2007. Firmaría con los Filis de Filadelfia en julio de 2009 y su registro fue de 5-1 en nueve salidas.

Es el décimo lanzador que suma 100 triunfos en ambas ligas.

Intentó lanzar nuevamente en 2010 y 2011, pero fue infructuoso, optando por el retiro en diciembre de 2011.

Terminó su carrera con un récord de 219-100, para un porcentaje de victorias de 0.687 que es el sexto de todos los tiempos. Ganó cinco títulos de efectividad, capturó seis títulos WHIP y un promedio de 10.04 ponches por cada nueve entradas (3° de todos los tiempos detrás de Randy Johnson y Kerry Wood).

John Smoltz: 455 votos de 549 posibles para 82.9%
21 temporadas: 1988-2009
Smoltz es el único lanzador en ganar más de 200
juegos y salvar más de 150 encuentros

8 Juegos de Estrellas, un premio Cy Young, 213 victorias, 154 juegos salvados, 3.084 abanicados. Lanzó con Bravos de Atlanta, Medias Rojas de Boston y Cardenales de San Luis.

John Smoltz se estableció como un caballo de batalla para un equipo joven, por desgracia, en medio de ese éxito prolongado, una operación en el codo, lo hizo convertirse en cerrador durante unos años convirtiéndolo en el único jugador en la historia con al menos 200 triunfos y 150 salvamentos.

"Ciertamente estoy orgulloso de ello. Ni siquiera sé si tengo una palabra para ello. Quiero decir, literalmente, le di todo lo que tenía cada vez que iba a lanzar”, comentó Smoltz en los últimos años de su carrera. "En la vida, sin duda, no todo va bien, pero este ha sido el mejor momento de mi vida."

Proveniente de una familia beisbolera, Smoltz fue un fans de los Tigres de Detroit, equipo al que vio ganar la Serie Mundial de 1984, su padre y él cavaron un pedazo de césped del Tiger Stadium y lo sembraron en el patio trasero de su casa.

De acuerdo a sus planes, tenía intenciones de asistir a Michigan State para desempeñarse como jugador de béisbol y baloncesto, pero al ser seleccionado por Detroit en la ronda 22 del draft de 1985, todo cambio.

Después de casi dos temporadas consolidado en el sistema de ligas menores de los Tigres, sería  adquirido por los Bravos de Atlanta.

"Yo estaba muy decepcionado", señalo Smoltz años más tarde. "Pensé, voy a el peor equipo del béisbol… Luego cambié mis pensamientos, dándome cuenta de que puedo llegar a las grandes ligas más rápido y ayudar a convertir esta franquicia en ganador".

En 1988, Smoltz estaba lanzando en las Grandes Ligas, culminando ese año con marca de 2-7. Pese al registro estaría lanzando en el Juego de Estrellas al siguiente año.

Durante sus primeras cinco temporadas, de 1989 a 1993, Smoltz promedió 14 victorias, 34 aperturas y 182 ponches con una efectividad de 3.42. Este tramo también incluyó la notable campaña de 1991, una temporada en la que Atlanta perdió el título de la Serie Mundial ante los Mellizos de Minnesota. El Clásico de Otoño de ese año es recordado por la actuación de Jack Morris que lanzó 10 entradas en el séptimo juego en la que Minnesota ganaría por la mínima, y donde Smoltz actuó durante 7 entradas y media para salir sin decisión.

Atlanta fue liderada por sus tres grandes abridores: Greg Maddux, Tom Glavine y Smoltz para conseguir 14 títulos divisionales consecutivos desde 1991 hasta 2005. Apareció en 41 juegos de postemporada, dejando registro de 15-4 con 2.67 de efectividad y 199 abanicados. En cinco Series Mundiales, incluyendo la ganada en 1995 ante los Indios de Cleveland, Smoltz deja marca de 2-2 con 2.47 de efectividad en ocho aperturas.

Las lesiones comenzaron a hacerse sentir en su carrera. En septiembre de 1994 le removieron un espolón óseo y algunas astillas de su codo derecho.

Dos años más tarde, Smoltz capturó el premio Cy Young de la Liga Nacional al dejar un registro 24-8 (incluyendo 14 victorias consecutivas desde el 9 de abril al  19 de junio), una efectividad de 2.94 y 276 ponches. Smoltz terminó la cadena de Maddux de cuatro premios Cy Young consecutivos. Sumando los obtenidos por Glavine en 1991 y 1998, los lanzadores de los Bravos ganaron seis premios Cy Young en ocho años.

"Todo el mundo sentía que necesitaba esto para estar a la par con Greg y Tommy", dijo Smoltz después de ganar el Cy Young. "Por lo menos ganar el premio quita la presión de eso. Sé que en el camino que va será un honor haber jugado con esos dos chicos".

Tras un 1997 discreto en donde dejó marca de 15-12, Smoltz dejó registro de 43-23, en los siguientes tres años, pese a tener varias visitas a la lista de lesionados y someterse a una cirugía de codo para remover astillas de sus huesos.

La peor de las lesiones se produjo en 2000 cuando se perdió toda la temporada tras romperse el ligamento colateral media en su codo derecho en el entrenamiento primaveral y someterse a una cirugía Tommy John en marzo. Una reaparición en 2001 no fue placentera al volver a la lista de lesionados tras cinco aperturas. Regreso en julio convertido en relevista para preservar su brazo.

Tras 159 victorias como abridor, Smoltz transito un nuevo camino como cerrador ese año dejando 10 salvados en 11 oportunidades con 1.59 de efectividad.

"Ha sido un ajuste mental. Realmente no ha sido tan malo", dijo Smoltz en el momento. "Como aperitivo, ya sabes cuándo vas a lanzar. Eso ha sido probablemente la transición más difícil”.

En 2002, su primera temporada como cerrador, estableció registro para la Liga Nacional con 55 salvados. En el lapso de tres temporadas y media salvó 154 encuentros en 168 oportunidades. Pese a que las lesiones volverían como la tendinitis en 2003 y la cirugía de 2004 para limpiar el tejido cicatrizal.

Regreso a la rotación en 2005 y promedio 15 victorias y 222 entradas de labor en los siguientes tres años, ganando en ese periodo su partido 200 en mayo de 2007, antes que la tendinitis volviera a mandarlo a la lista de lesionados.

En 2008 es el decimo sexto lanzador con 3.000 abanicados, y esa temporada acortada por varias lesiones, se anunció que sería sometido nuevamente a una cirugía de hombro al finalizar la temporada, con esto su relación con Atlanta llegaría a su fin.

Firmó como agente libre con los Medias Rojas de Boston en 2009 y tras ocho salidas sería cambiado a los Cardenales de San Luis donde solo realizó siete aperturas. Dejo registro de 3-8 con 6.35 de efectividad.

"Me encanta competir", dijo Smoltz. "Pero no puedo competir contra mi cuerpo nunca más."

Ese sería su último año como profesional.

Smoltz terminó su carrera de 21 años en Grandes Ligas con un récord de 213-155, 154 salvamentos, 3,084 ponches y una efectividad de 3.33. Ganador de 14 o más juegos en 10 ocasiones y dos veces lideró la Liga Nacional en victorias (1996 y 2006), entradas lanzadas (1996 y 1997) y ponches (1992 y 1996). Además de ganar un Bate de Plata en 1997. También fue honrado por sus esfuerzos humanitarios, con el Premio de Lou Gehrig y el Premio Roberto Clemente ambos en 2005 y el Premio Rickey Sucursal 2007.

Es el único lanzador en ser sometido a la Tommy John en ser exaltado al Salón de la Fama.

Craig Biggio: 454 votos de 549 posibles para 82.7%
20 temporadas: 1988-2007

7 Juegos de Estrellas, cuatro Guantes de Oro, cinco Bates de Plata, 3.060 hits, 668 dobles (5° de todos los tiempos), 285 golpeados (2° de todos los tiempos). Jugó para los Astros de Houston.

Biggio estaba destinado a convertirse en jugador de futbol americano. Se destaco como uno de los mejores corredores de King Park High School en Long Island, pero sus calificaciones no estuvieron a la altura de los logros deportivos.
 
Biggio es el único pelotero de Houston con 3.000 hits
Tras perder esa oportunidad, Biggio se enfoco en obtener una beca para jugar al béisbol en la Universidad

Tras perder esa oportunidad Biggio se decidió por una beca para jugar al béisbol en la Universidad de Seton Hall, posicionándose rápidamente entre los favoritos de los scouts. En 1987 sería seleccionado en la primera ronda (22 en la selección global) por los Astros de Houston.

Después de tan sólo 141 juegos de ligas menores más de dos temporadas - durante el cual registro un promedio de bateo de .344 - Biggio fue llamado a los Astros en junio de 1988. Participó en 50 encuentros , suficientes para asumir el puesto de receptor titular de los siderales en 1989, año en consiguió 13 cuadrangulares y 60 remolcadas para ser acreedor del Bate de Plata en el viejo circuito.

En la campaña de 1991, Biggio promedio .295, consiguiendo su primer Juego de Estrellas. Y rápidamente, se hablaba de cambiarlo de posición para alargar su carrera, debido al desgate que producía la receptoría. Para la campaña de 1992, se transformó en el segunda base regular de Houston y participó en todos los 162 encuentros de su club, coronando ese año con su segunda asistencia al Juego de Estrellas.

“No puedo explicar lo difícil que era la transición de cátcher a segunda”, dijo Biggio en 2003. “Es como si fueras a batear contra Randy Johnson para conseguir ser exitoso”.

"Ahora que todo ha terminado, te puedo decir que era bastante difícil."

Biggio, sin embargo, hizo que pareciera increíblemente fácil el cambio. De 1993 a 1999, incremento su ofensiva sin sacrificar su velocidad. Tuvo un promedio de 17 jonrones y 33 bases robadas, más 116 anotadas como primer bate de los Astros. Fue un bateador de muchos extrabases, tanto que sus 668 dobles, son la quinta marca de todos los tiempos, pero son lo máximo para un bateador derecho en el béisbol.

En 2003, Biggio volvería a demostrar su polivalencia al cambiar de posición, tras la firma de Jeff Kent, paso al jardín central durante las siguientes dos temporadas, antes de regresar a la segunda base, para los tres últimos años de su carrera.

“Cada cambió que realice fue un reto”, señalo Biggio. “Empiezas como receptor, luego a la segunda base y posteriormente al jardín central… son las tres posiciones más importantes en el beisbol. Estoy orgulloso de haberlo hecho con solvencia”.

Biggio se unió al club de los 3,000 hits en 2007, su último año en las Grandes Ligas. En total, pasó 20 temporadas con los Astros, promediando 281 con 1,844 carreras anotadas (15o de todos los tiempos), 291 jonrones y 414 bases robadas. Fue golpeado por un lanzamiento en 285 ocasiones - segundo de todos los tiempos - ganó cinco premios Bate de Plata (uno en la receptoría y cuatro en la segunda base) y cuatro premios Guante de Oro en la segunda base (1994-1997).

Nunca pudo ganar una Serie Mundial, su única participación fue en 2005, en la que Medias Blancas de Chicago los barrió. Se retiro sin remordimientos, siendo el único jugador en la historia en tener 3.000 hits, 600 dobles, 400 bases robadas y 250 cuadrangulares.

Se retiro para pasar más tiempos con sus hijos, afirmando que ser padre es una de las cosas más importantes para él.


El dato

El dominicano Pedro Martínez será el séptimo latinoamericano en ser electo por la Asociación de Escritores de Béisbol de América (BBWAA), uniéndose a Roberto Clemente (1972, Puerto Rico), Juan Marichal (1983, República Dominicana), Luis Aparicio (1984, Venezuela), Rod Carew (1991, Panamá), Tany Pérez (2000, Cuba) y Roberto Alomar (2011, Puerto Rico). Otros latinos que fueron exaltados vía Comité de Veteranos son: Martin Dihigo (1977, Cuba), Ely “Buck” Canel (1985, Argentina), Jaime Jarrín (1998, Ecuador), Orlando Cepeda (1999, Puerto Rico), Rafael “Felo” Ramírez (2001, Cuba), José Méndez (2006, Cuba), Cristóbal Torrentes (2006, Cuba).


@beisboladentro

jueves, 23 de julio de 2015

Semana de cambios


Este 31 de julio es la fecha límite para que los equipos de Grandes Ligas realicen cambios de manera oficial.

Es un día donde la mayoría de los equipos se refuerzan para consolidar sus aspiraciones de llegar a la postemporada.

Es un día donde varias figuras se ven envueltas y son determinantes en la consecución de un título.
Cole Hamels es interés de varias organizaciones, todo
parece indicar que estará lanzando en la Americana

Quien no recuerda cuando los Azulejos de Toronto tomaron a Paul Molitor de los Cerveceros de Milwaukee, y este fue baluarte en la conquista de su segundo anillo de Serie Mundial en 1992. Incluso los mismos Azulejos habían hecho un movimiento similar un año atrás con David Cone para conquistar el clásico de otoño.

Algunos, fueron determinantes pero no continuaron con el equipo, haciéndolos grandes perdedores por el sacrificio de entregar figuras prometedoras. Allí estuvieron Randy Johnson que paso de los Marineros de Seattle a los Astros de Houston o C.C. Sabathia cuando dejo los Indios de Cleveland y se marcho a los Cerveceros de Milwaukee.

El 31 de julio dicta que equipo ganará la Serie Mundial, más allá de que un pelotero marque la diferencia, es la manera agresiva como el gerente general hace los cambios necesarios para fortalecer las fallas de su equipo.

Por año hemos visto este proceso y nos hemos sorprendido por los cambios.

Este año nada parece cambiar la tónica.

Al momento de redactar este artículo Scott Kazmir dejaba a los Atléticos de Oakland para irse a los Astros de Houston, mientras Aramis Ramírez hacía lo propio al cambiar de los Cerveceros de Milwaukee a los Piratas de Pittsburgh.

Ambos casos presentan cierta similitud.

Kazmir llega a la ciudad donde nació para erigirse como el líder de la rotación de los sorprendentes Astros que marchan en el primer lugar de su división. El veterano zurdo espera ser el complemento ideal del as Dallas Keuchel, quien es la estrella del pitcheo de los siderales. Entretanto, Ramírez llega al equipo con el que debutó profesionalmente para ayudarlos a llegar por tercer año consecutivo a la postemporada.

Asimismo, para el dominicano el cambio representa terminar su carrera donde comenzó, mientras que Kazmir es probable que no forme parte de los Astros el próximo año.

Filis de Filadelfia, Atléticos de Oakland, Rojos de Cincinnati, Cascabeles de Arizona, Medias Rojas de Boston y Rockies de Colorado, se presentan como los grandes vendedores, mientras que el zurdo de los Filis, Cole Hamels es la pieza más apetecible para ser adquirido.
Otras figuras como Johnny Cueto, Shane Victorino, Chase Utley, Ryan Howard, Jay Bruce, Devin Mesoraco, entre otros, se presentan como candidatos a cambios, incluso nombres como el de Yoenis Céspedes y David Price se suman a la lista, pese a estar en un equipo competitivo como los Tigres de Detroit, que marcha lejos de la clasificación, pero con intenciones de comenzar a reforzar sus granjas.

Para los representantes de la tierra de Bolívar, el 31 de julio también ha tenido un extenso historial de cambios, algunos positivos, otros determinantes y uno que otro negativo.

Quien no recuerda el cambio de Medias Blancas de Chicago y Rangers de Texas de julio de 1989. Los patiblancos cambiaron a Fred Manrique y Harold Baines por los promotores Wilson Álvarez, Scott Fletcher y Sammy Sosa.

Cinco equipos han mostrado interés en los servicios
de Gerardo Parra, que podrían cambiar de aires en
las próximas horas
O el más llamativo hecho por los Marineros de Seattle y Astros de Houston en 1998. Seattle transfiere a su abridor Randy Johnson por los tres principales prospectos de los siderales: Freddy García, Carlos Guillen y John Halama.

En 2015, Gerardo Parra, Carlos González y Carlos Carrasco son los que han sido nombrados en rumores de cambios.

Parra ha revalorizado su valor desde que Craig Counsell asumió las riendas de los Cerveceros de Milwaukee. Mets de Nueva York y Gigantes de San Francisco han asomado el interés en el zuliano ganador de dos Guantes de Oro.

González ha estado en el radar de los Reales de Kansas City. La lesión de Alex Gordon que estará fuera varias semanas ha dejado un hueco valioso que cubrir y una pieza como González en un equipo competitivo no caería mal, Colorado ha mostrado intención de cubrir parte de su oneroso salario.

Al igual que Parra, Carrasco también se ha revalorizado con cada apertura que ha realizado con los Indios de Cleveland, esta semana su nombre comenzó a sonar como pieza de cambio y es probable que equipos como Mellizos de Minnesota, Orioles de Baltimore, Mets de Nueva York o Piratas de Pittsburgh lo sumen a sus filas.

En las próximas horas comenzará la danza de cambios y más de uno comenzará a temblar con cada movimiento que realicen.

Es quizás la semana más movida de la temporada.



Sabías que...

Los Cerveceros de Milwaukee adquirieron a Gerardo Parra en julio del año pasado. En lo que va de julio batea para 408 de promedio con 1.219 de OPS, siendo el primer bate y jardinero central de los lupulosos. En lo que va de temporada batea para 310 con nueve jonrones, 30 remolcadas, 43 anotadas y seis bases robadas en 89 encuentros.


@beisboladentro

jueves, 16 de julio de 2015

No solo Grande Ligas se producen en Venezuela


Manuel González escribió con letras doradas su estreno en las Grandes Ligas en el año 2010. Era el primer árbitro venezolano que formaba parte de una cuarteta arbitral en un partido en el mejor béisbol del mundo.

Con su ascenso se abrió la posibilidad de que más hombres de azul de la tierra de Bolívar cumpliesen ese anhelo que González inicio.

Y todo parece indicar que este viernes uno de ellos seguirá sus pasos.

Carlos Torres será el segundo umpire en debutar en Grandes Ligas, cuando este cubriendo la tercera base en un encuentro entre  los Indios de Cleveland y los Rojos de Cincinnati a jugarse en casa de los últimos.
Carlos Torres dará mayor impulso a la calidad arbitral en la
2015-2016 de nuestra pelota. Pero es probable que deje sus
funciones como hizo González cuando fue ascendido a
tiempo completo en las mayores

El venezolano de 35 años de edad, había recibido su ascenso en marzo de este año, cuando MLB le asigno el dorsal 37, mientras se desempeñaba como autoridad en los juegos primaverales. Su estatus es “up and down”, término que utilizan los americanos con aquellos árbitros que cubren vacantes o imprevistos de otro colega. Misma situación atravesó González en 2010, hasta que recibió su grado al año siguiente.

Torres sustituirá a Mike Ripperberg y estará en las mayores durante el fin de semana.

Uno de los mejores en la LVBP
Conocido por su manejo de la zona de strike, es uno de los oficiales más reconocidos en la LVBP, por su desempeño en el terreno. Los reportes indican que su zona de strike es consistente y su manejo de las situaciones le llevó a ser el primero en recibir el premio Gualberto Acosta como el mejor árbitro en nuestra pelota en la 2013-14. En la pasada temporada, finalizó segundo detrás de Robert Moreno, de quien se dice, podría ser el próximo en recibir el llamado a las mayores.

Desde joven soñó con ser lanzador y emular a su ídolo Urbano Lugo, lamentablemente no gozo de las condiciones para ser profesional y optó por continuar sus estudios, hasta que un día su amor por la pelota lo motivo a probarse como árbitro, donde recibió ayuda y consejos de Darío Rivero y de Manuel González.

Ya con más de una década de trabajo, todo ese esfuerzo se verá recompensado este fin de semana.

Serán tres jornadas donde Torres será evaluado por sus colegas, él sabe que un buen desempeño le permitirá recibir el llamado nuevamente y continuar los pasos que González tuvo antes de recibir la venia oficial para ser árbitro de Grandes Ligas.

Con este ascenso, se confirma nuevamente el potencial de Venezuela con las Grandes Ligas. No solamente tenemos peloteros y técnicos, ya contamos con presencia arbitral, lo que eleva el nivel de nuestros umpires en la pelota local.


El dato
Nueve venezolanos se encuentran trabajando de árbitros en ligas menores. De acuerdo a los reportes Robert Moreno, David Arrieta y Jorge Terán, estarían en el radar para debutar en los próximos años en las mayores.

@beisboladentro

domingo, 12 de julio de 2015

Un derby con mucha historia


Reggie Jackson es un fan declarado de la competencia de jonrones.

En innumerables ocasiones ha manifestado su intención de participar, si la misma hubiera sido implementada en su época de jugador.

Se imaginan lo que habrían hecho Babe Ruth, Lou Gehrig, Mickey Mantle, Jimmie Foxx, Harmon Killebrew, Hank Aaron, Willie Mays, Mike Schmidt, entre otros grandes jonroneros con esta competencia, quizás la historia que hoy conocemos, sería otra.

La edición de 2015 cumple 30 años de creada.
Griffey ha ganado tres derby de jonronees

Para ello, nos remontamos a 1985, cuando el Metrodome de Minnesota, se convirtió en testigo del nacimiento de este evento, y Dave Parker, miembro de los Rojos de Cincinnati, se llevaría los máximos honores al despachar seis vuelacercas; dos más que el resto de los competidores.

Desde entonces, cada edición del Festival de Cuadrangulares ha tenido una cita con la historia.

Una de ellas la protagonizó Ken Griffey Jr, quien será el encargado de lanzar la primera bola este lunes.

El junior, es el máximo ganador en estos eventos con tres coronas, (dos de ellas consecutivas) en ocho participaciones.

Su debut fue en 1990, en el mítico Wrigley Field de Chicago, donde no despachó ningún vuelacercas pese a los nombres rimbombantes como Mark McGwire, José Canseco, Cecil Fielder, Darryl Strawberry, Matt Williams, Bobby Bonilla y el ganador Ryne Sandberg, que despacho tres jonrones.

Fue un festival donde el jonrón no se hizo presente y solo se pudieron conectar cinco vuelabardas.

Para 1994, el evento se jugó en el Three Rivers Stadium de Pittsburgh, y Griffey ya era una estrella consagrada con los Marineros de Seattle, ese año conectó 7 bambinazos para llevarse el galardón por encima de Fred McGriff, Rubén Sierra, Frank Thomas, Jeff Bagwell, Dante Bichette, Albert Belle y Mike Piazza.

Colorado recibió la edición de 1998 y Griffey era amplió favorito junto a Mark McGwire.

Aprovechando las bondades del parque rocalloso, Griffey mantuvo consistencia en las dos primeras rondas con ocho cuadrangulares para derrotar en la final a Jim Thome, que pese a igualarlo a tres jonrones en la última ronda, caería derrotado por la cantidad de vuelacercas acumulados (19 a 17).

Sería su segunda corona en estos clásicos y el primero que lo gana en dos ocasiones.

A pesar de haber dicho que no participaría en la edición de 1999 por estar cansado, Griffey aceptó ir horas antes del evento, debido a tantas presiones, - algunas de patrocinantes -, para revalidar su título que tendría como contendientes a Mark McGwire y Sammy Sosa, quienes un año atrás se enfrascaron en la lucha por el récord de jonrones de Roger Maris, McGwire estableció el registro en 70, mientras Sosa lo secundo con 66.

McGwire brindó un espectáculo de 13 jonrones descomunales en primera ronda, Griffey logró lo necesario para acceder a la siguiente ronda con tres jonrones, mientras Sosa quedaba fuera al conectar dos.

Griffey se apoyo en lo corto del jardín derecho y sacó diez en la segunda ronda suficientes para acceder a la final y derrotar a un sorpresivo Jeromy Burnitz que dejó a McGwire fuera de la final. Griffey ganó su tercer título de jonrones y con ello entró en la historia de estos eventos.

Su última comparecencia fue en el 2000, donde también llegó a la final y buscaba una tercera corona en fila, pero Sammy Sosa estropeo todo con un festín de nueve jonrones en la última vuelta contra dos del junior.

En total despacho 70 cuadrangulares y ocupa el segundo puesto entre los participantes, superado solamente por David Ortiz con 77.

Latinos al poder
40 latinoamericanos han dicho presentes en un Festival de Cuadrangulares, siendo la República Dominicana, quien más representante ha tenido con nueve, de las cuales Sammy Sosa ha aparecido en seis ocasiones.
Ortiz es el líder histórico en los derby de jonrones con 77

El primer latino en asistir a estos eventos fue el cubano José Canseco que lo hizo en la II edición de 1986, que se jugó en el Astrodome de Houston.

El jardinero de los Atléticos de Oakland, que ese año sería galardonado con el premio Novato del Año, solo pudo despachar un cuadrangular. Wally Joyner y Darryl Strawberry consiguieron cuatro cada uno para quedar colíderes del evento.

Además de Canseco, Joyner y Strawberry, participaron en ese festival Dave Parker (campeón defensor), Hubie Brooks y Jesse Barfield.

Otro empate se dio en la edición de 1989, efectuada en el Angel Stadium de Anaheim, Eric Davis y Rubén Sierra, quedaron igualados con tres jonrones.

Para el boricua Sierra significo ser el primer latino en coronarse en estos eventos, que después de esta edición, se decidió que los peloteros que quedarán igualados irían a jornadas extras para determinar el campeón.

Otro boricua que acarició la gloria fue Juan González, evento que se celebro en 1993 en el Oriole Park at Camden Yards de Baltimore.

González superó en dos rondas adicionales a Ken Griffey Jr.

Ambos dieron siete vuelacercas y en la ronda adicional cuatro. Pero González demostró su buen momento y sacó un cuadrangular en la segunda ronda ante un junior que poco pudo hacer.

Quizás la historia sería benevolente con él más adelante.

Tino Martínez se alzó en la edición de 1997 jugada en el Jacobs Field de Cleveland.

El cubano que estaba en su primera campaña con el uniforme de los Yankees de Nueva York derrotaría en la final al canadiense Larry Walker 3-1. Era la primera vez que un pelotero norteamericano no estaba involucrado en la final.

También fue la primera ocasión en que el pelotero con más cuadrangulares en el evento no se llevó el galardón, siendo Walker el protagonista con 19.

En el año 2000, Sammy Sosa de la República Dominicana se convertiría en el cuarto latino en ganar estos eventos. El jugador de los Cachorros de Chicago, montó un espectáculo de 26 cuadrangulares en total para derrotar a Griffey 9-2 en la final que se jugó en el Turner Field de Atlanta.

Con su actuación, Sosa establecería una marca para estos eventos, dejando atrás los 19 cuadrangulares logrados por Ken Griffey Jr (1998) y Larry Walker (1997).

Sosa amenazo el registro de Griffey de conseguir dos coronas de cuadrangulares, pero cayó en la edición de 2001 que se realizó en el Safeco Field de Seattle, cuando fue derrotado por otro latinoamericano, Luís González de Cuba, que disparo seis jonrones por dos de Sosa.

Fue la primera vez que la final la decidían dos latinoamericanos.

Miguel Tejada de la República Dominicana sería el sexto latino en alzarse con un festival de jonrones en la edición de 2004, jugada en el Minute Park de Houston. El campocorto de los Orioles de Baltimore dejó atrás a Lance Berkman 5-4 en la final donde establecería marca para estos clásicos con 27 jonrones en total.
Abreu tiene el registro de más jonrones
en un evento con 41

Bob Abreu, se llevó los máximos honores en 2005, (tal día como hoy) estableciendo marca para una primera ronda con 24 y en total con 41.

La edición de ese año se hizo en el Comerica Park de Detroit y los participantes fueron representantes de cada país, debido al Clásico Mundial de Béisbol que se realizaría al año siguiente.

Abreu derrotó a Iván Rodríguez de Puerto Rico 11-5.

El AT&T Park de San Francisco sirvió de escenario para que Vladimir Guerrero fuera el octavo latino en ganar un festival de cuadrangulares en 2007.

El dominicano derrotaría en la final al boricua Alex Ríos, que si bien fue el que más jonrones consiguió perdería 3-2.

David Ortiz montó un show en la edición de 2010 en el Angel Stadium de Anaheim.

Derrotó a otro dominicano Hanley Ramírez en la final 11-5. El designado de los Medias Rojas de Boston, coleccionó en total 32 vuelacercas para ser la tercera mayor cantidad en un festival, detrás de Abreu (2005) y Josh Hamilton (35 en 2008).

Robinson Canó se llevó la corona en 2011 en el Chase Field de Arizona.

El dominicano derrotaría al mexicano Adrián González 12 a 11 en un final de infarto, - la quinta entre dos latinos -. Canó despacho 32 jonrones en total y González logró 31.

Yoenis Céspedes ha sido el último latino en llevarse los honores en par de ocasiones consecutivas (2013-2014), igualando lo hecho por Ken Griffey, y ubicándose en el segundo puesto entre los máximos ganadores.

En 2013 en el Citi Field de Nueva York, dejaría colgado a un joven Bryce Harper 9-8.

Céspedes consiguió 17 jonrones en la primera vuelta – tercera cifra más alta en una ronda – detrás de lo alcanzado por Abreu, Hamilton e igualado con Ortiz (2005). Acudió a esa cita como invitado.

Mientras el año pasado supero la primera vuelta en una ronda adicional para disputar la final con Todd Frazier a quien derroto cómodamente 9-1.

Récords
Esa es una de las metas de los participantes año tras años.

Aquí algunos registros que se fueron dando desde sus inicios.

  • Cal Ripken Jr ganó la edición de 1991 y fue el MVP del Juego de Estrellas, algo que igualó Garret Anderson en 2003.
Más jonrones en una ronda:
2008: Josh Hamilton: 28
2005: Bob Abreu: 24
2013: Yoenis Céspedes: 17
2005: David Ortiz: 17
2006: David Wrigth: 16
2003: Albert Pujols: 14
2001: Jason Giambi: 14
2010: Corey Hart: 13
1999: Mark McGwire: 13

  • Mike Piazza no dio jonrón en dos invitaciones al festival en años consecutivos (1993 y 1994).
  • Cecil y Prince Fielder han sido la única pareja de padre e hijo en participar en estos eventos.

Más cuadrangulares en total en una edición:
2005: Bob Abreu, 41
2008: Josh Hamilton, 35
2010: David Ortiz, 32
2011: Robinson Canó, 32
2011: Adrián González, 31
2012: Prince Fielder, 28
2004: Miguel Tejada, 27
2000: Sammy Sosa, 26
2003: Albert Pujols, 26
2010: Hanley Ramírez, 26
2002: Jason Giambi, 24
2006: Ryan Howard, 23
2003: Jason Giambi, 23
2009: Prince Fielder, 23
2006: David Wright, 22
2003: Garret Anderson, 22
2008: Justin Morneau, 22

Más cuadrangulares en una segunda ronda:
2004: Miguel Tejada: 15
2003: Albert Pujols: 14
2010: David Ortiz: 13
2011: Robinson Cano: 12
2010: Hanley Ramírez: 12
2007: Alex Rios: 12
2000: Sammy Sosa: 11
2003: Jason Giambi: 11
2012: Prince Fielder: 11
2011: Adrián González: 11
2000: Sammy Sosa: 11
2006: Ryan Howard: 10
2004: Lance Berkman: 10
1999: Ken Griffey Jr. 10
1996: Barry Bonds: 10

Más jonrones en una final:
2011: Robinson Canó: 12
2012: Prince Fielder: 12
2005: Bob Abreu: 11
2010: David Ortiz: 11
2000: Sammy Sosa: 9

Ver aquí participantes del derby de jonrones año tras año

El dato
Cincinnati recibirá por segunda ocasión un Festival de Cuadrangulares, la primera vez fue en 1988 en el antiguo Riverfront Stadium, donde no se realizó debido a la suspensión por lluvia. Latinoamérica ha ganado en 11 oportunidades, siendo Yoenis Céspedes el máximo ganador con dos.

Sabias que…
De 1985 a 1994, se llevó una sola ronda de jonrones en estos festivales, a partir de 1995 hasta 2004, se efectuaron dos rondas de clasificación para acceder a la final. Para 2005, en honor al Clásico Mundial de Béisbol, se efectuó un festival por países. En 2006, se modifico la regla a cuadrangulares acumulados para acceder a la final. Se volvió al sistema de dos rondas de clasificación de 2007 a 2014. Para este año la regla cambió, serán enfrentamientos directos con la mayor acumulación de cuadrangulares hasta el 7 de julio y cada bateador dispondrá de cinco minutos para sacar la mayor cantidad de pelotas del parque.

@beisboladentro