El 11 de julio de 1914, Babe Ruth piso por primera vez un parque de Grandes Ligas, sin saber que años después se convertiría en el jugador más famoso de todo el béisbol. Una leyenda en la cultura norteamericana
El
béisbol de las Grandes Ligas es uno de los deportes que más afición tiene en
los Estados Unidos, múltiples figuras han escrito historias propias para
convertirse en leyendas, pero solo una ha trascendido más allá, siendo su
legado difícil de igualar, su nombre: George Herman “Babe” Ruth.
Nacido
en la localidad de Maryland, Baltimore, fue un rebelde que constantemente se
metía en problemas, motivo por el cual su padre decide inscribirlo en la
escuela industrial Santa María, dirigida por monjes católicos, quienes
inculcarían en Ruth modales y respeto, además de desarrollarle la pasión y el
amor por el juego de béisbol.
La
fama de buen lanzador llegó rápidamente a oídos de Jack Dunn, dueño de los
Orioles de Baltimore, en la Liga Internacional, quien lo contrata y se
convierte en el guardián de Ruth, adoptando el apodo de “Babe”.
Para
1914 los Medias Rojas de Boston compran su contrato y es enviado a Providence
con quienes ganaría 22 juegos, motivo por el cual se ganaría su ascenso y
concluiría ese año con dos triunfos y un revés. Al año siguiente sale airoso en
18 juegos, siguiendo con 23 victorias en 1916, lanzando ese año el juego más
largo en la historia de la Serie Mundial (14 entradas) para llevarse el triunfo
ante los Dodgers.
En
1918, Boston decide mudar a Ruth a los jardines aprovechando su capacidad para
batear, quedando líder en vuelacercas con 11. A pesar de esto, Boston siguió usándolo
como lanzador copilando marca de 13-7 en 1918 y 9-5 al año siguiente.
La
fama de Ruth trascendería en 1920 cuando éste fue cambiado a los Yankees de
Nueva York. Llegaría a una divisa que jamás había jugado una Serie Mundial.
Nace el sultán del swing
Jugando
a tiempo completo como bateador, Ruth conseguiría su primer récord en cuadrangulares
en 1920 al disparar 54, pulverizando la marca al año siguiente con 59, números
que desafiaban a los incrédulos, pues el resto de la Liga Americana apenas
consiguió 315. Su promedio de sluggig de 847 fue una marca prohibida que sólo
él pudo acariciar al año siguiente con 846.
Fue
líder en vuelacercas durante doce ocasiones, un récord que se mantiene vigente.
Las practicas de bateo presentaba llenos para ver solamente a
Ruth batear, jugando en el Polo Grounds, Ruth fue decisivo para que los dueños
de Nueva York, construyeran en 1923 el Yankee Stadium, denominada por los fanáticos
como “La casa que Ruth construyó”, donde siguió cosechando registros ofensivos
y convirtiendo a los Yankees en uno de los equipos más dominantes durante los
siguientes años, ganando esa temporada su tercer gallardete consecutivo y su
primera Serie Mundial.
En
1927 estableció una nueva marca en vuelacercas al conseguir 60, registro que
duró 34 años y fue roto por un jugador de los Yankees, Roger Maris. Estableció
con Lou Gehrig una de las duplas más letales de todos los tiempos, ayudando a
la organización a capturar siete banderines y cuatro títulos de Serie Mundial.
El ocaso
Ruth
siguió siendo el referente ofensivo de los Yankees, pero el meteórico ascenso
de Lou Gehrig, Tony Lazzeri, y otras figuras fue restando valor al jugador en
los siguientes años, el deseo de ser dirigente era lo que más anhelaba y tuvo
roces constantes con sus managers y con Jacob Ruppert, dueño de la organización.
Al momento de ser retirado su número en la organización de los Yankees de Nueva York |
Dolido
por no ver su sueño realidad, Ruth firmó con los Bravos, pero su estadía
tampoco fue placentera, debido a que era usado para atraer afición al estadio.
Tuvo su momento de gloria el 25 de mayo de 1935, al disparar tres
cuadrangulares, incluyendo un batazo portentoso sobre el techo del jardín
derecho del Forbes Field de Pittsburgh.
Semanas
después del hito se retiraría del béisbol.
Cuando
se marchó de los terrenos Ruth llevaba consigo una impresionante cifra de 56
récords en su haber, incluyendo la venerada marca de 714 vuelacercas, marca que
se creyó imbatible.
Además dejo un promedio de por vida de 342, y el más alto
porcentaje de slugging de la historia 690.
En
1936, fue uno de los cinco miembros fundadores que fueron exaltados al Salón de
la Fama.
Números de Ruth de por vida en Grandes Ligas |
Durante el otoño de 1946, se
descubrió que Ruth tenía un tumor maligno en el cuello, y su salud
comenzó a deteriorarse rápidamente. El 13 de junio de 1948, su número de camiseta "3" fue retirado por los
Yankees durante su última aparición en el Yankee Stadium. Babe, perdió su batalla contra el cáncer
el 16 de agosto de 1948. Su cuerpo fue veloriado en el Yankee Stadium, y con un funeral dos días más tarde en la Catedral de San Patricio en Nueva York. En
total, más de
100.000 personas presentaron
sus respetos a la
familia del jugador.
Han transcurrido 66 años
de su partida y Ruth sigue siendo la figura más grande del béisbol, en una
época donde los esteroides han opacado a las mayores, la leyenda de famoso
número “3”, continua vigente. Ruth salvó al béisbol después del escándalo de
los Medias Negras, ayudo a que el béisbol se convirtiera en negocio en los años
de la Gran Depresión y dio un impacto al juego en los venideros años.
El dato
En seis campañas como lanzador con los Medias Rojas, Ruth ganó 89 juegos. Es el único lanzador con mil entradas lanzadas y promedio superior a los 300. Harry Frazee, propietario de los Medias Rojas y productor teatral, vende a Ruth a los Yankees para saldar deudas por un musical.
@beisboladentro
No hay comentarios:
Publicar un comentario