Oswaldo Guillén cumple su sueño de dirigir a los Tiburones de La Guaira

 

La última vez que los Tiburones de La Guaira fueron campeones, Oswaldo Guillén era miembro de la organización. Se jugaba la temporada 1985-1986, y el campocorto era una de las principales figuras del club, venía de ser proclamado Novato del Año en las Grandes Ligas y participó en los 63 encuentros de los salados.

Desde entonces, han transcurrido 30 años sin un nuevo gallardete, La Guaira posee la seguidilla más larga sin títulos en la historia de la LVBP, y todo parece indicar que pudiera llegar a su final con Oswaldo Guillén, que el pasado miércoles fue nombrado como el nuevo mánager de los salados para la campaña 2016-2017.

La noticia revolucionó las redes sociales y los principales medios de comunicación del país, y pese a querer colocar al mirandino como el salvador de esa sequía, debemos recordar que el venezolano fue el artífice en que los Medias Blancas de Chicago acabarán con una sequía de 88 años sin títulos.

El contrato de Guillén es por una temporada; temporada que pudiera ser crucial para un conjunto que en las dos últimas campañas le ha faltado esa contundencia para llegar a la final, instancia a la que no acceden desde la 2011-2012, cuando cayeron en seis compromisos ante los Tigres de Aragua.

La contratación de Guillén da por finalizada la relación con Buddy Bailey, que durante estas dos temporadas llevó a La Guaira a la postemporada, si bien quedaron cerca del objetivo planteado, la gerencia no dudo en acercarse al técnico, objetivo que siempre tuvieron en mente desde que asumieron el control de la organización en 2004.

“Tenemos una gran relación con él. Cuando compramos al equipo él era mánager de los Medias Blancas y nos ayudó mucho”, comentó Francisco Arocha, presidente del club, vía telefónica al Diario Líder. “Finalmente se dio la oportunidad en esta ocasión, gracias a que terminó sus obligaciones contractuales con los Marlins y a que fue descartado para dirigir a la selección, pero es algo que siempre estuvo sobre la mesa y que ya habíamos conversado con Ozzie”.

La idea de tener a Guillén tomo su tiempo en cristalizarse. Era un sueño que él mismo deseaba. Tras retirarse como jugador en la 2000-2001, inicio rápidamente su carrera como técnico con los Expos de Montreal (hoy Nacionales de Washington) y Marlins de Florida (hoy de Miami), para luego ser nombrado en 2004 manager de los Medias Blancas de Chicago, equipo con el que alcanzo la gloria al año siguiente al conquistar la Serie Mundial.

Guillén se convirtió en el primer latinoamericano en obtener dicho pergamino y se mantuvo como mandamás en Chicago hasta el final de la campaña 2011, cuando fue cambiado a los Marlins de Miami, en una transacción que también involucró a peloteros de ligas menores. La gerencia de los peces lo despidió, tras concluir la temporada de 2012.

Mesías

Esta noticia, más allá de ser la respuesta de tantas plegarias de la fanaticada, debe llevarse con mucha calma. Es cierto que contar con Ozzie como nuevo estratega en la LVBP es, verdaderamente, un lujo. “Era algo que no podíamos dejar pasar”, como destacó Francisco Arocha, presidente de Tiburones de La Guaira, luego de confirmar la rúbrica del otrora ganador de la Serie Mundial de 2005.

Ahora bien, la llegada de Guillén no significa que, desde ya los guairistas pueden ir preparando sus maletas para la Serie del Caribe 2017. Él ha estado ligado a los Tiburones desde su retiro, su contrato es de una campaña y concentrará sus esfuerzos en acabar con esa sequía de títulos.

Sabe que su antecesor dejo el listón alto y pese a su fama de ser estricto con sus peloteros, Guillén deberá mantener esa disciplina para traducir eso en triunfos.

"Es el momento perfecto para hacerlo", dijo en una entrevista con la cadena CBS Chicago, donde tiene su residencia el venezolano. "Tenían 10 años diciéndome. Es el equipo con el que crecí y es el momento oportuno".

Tras disputar 13 campañas como jugador, Guillén no usará su experiencia con La Guaira como trampolín para regresar a las mayores, algo que anhela nuevamente, su deseo es más personal, es devolver esa gratificación que tuvieron hacía él, cuando le brindaron la oportunidad de ser profesional.

"Estoy concentrado en hacer lo mejor que pueda por Tiburones, necesitan ganar, están urgidos de ganar, la última vez que lo hicieron yo todavía era jugador. Simplemente quiero ir a allá abajo (Venezuela) y ayudar a esos muchachos a ganar el campeonato". Señalo el mirandino a la periodista Andreina Salas del Diario El Universal.

Se espera que Guillén ofrezca una rueda de prensa este lunes 15 de febrero, para dar todos los pormenores de su nombramiento. Igualmente se conoció que el mismo Guillén pidió dos permisos para ausentarse del club.

“Estará una semana en los entrenamientos y luego viajará a los Estados Unidos, aunque regresará a tiempo para el día inaugural. El segundo permiso será para que pueda transmitir la Serie Mundial”, acotó Arrocha.

Será la primera experiencia para Guillén en la LVBP, durante su carrera en las mayores dejó marca de 747 victorias y 710 derrotas, con cuatro campañas con record negativo. Fue ganador del Mánager del Año en 2005 y dirigió a la Liga Americana en el Juego de Estrellas de 2006.

El dato

Desde su último título, Tiburones de La Guaira ha tenido 23 managers antes del nombramiento de Guillén, que es apenas el criollo 13 en dirigirlos en su historia. Antecedieron a él: José Antonio Casanova, Luis Aparicio, Graciano Ravelo, Pompeyo Davalillo, Gustavo Gil, Luis Salazar, Jesús Alfaro, Flores Bolívar, Carlos Subero, Marco Davalillo, Omer Muñoz y Russell Vásquez.

@beisboladentro

Crédito de la fotografía: www.eluniversal.com