Enero sigue siendo tarea pendiente para las Águilas del Zulia

Hubo un tiempo en que se comentó que los Cardenales de Lara eran como las hallacas, solo llegaban a diciembre. Quizás ahora la frase sea para las Águilas del Zulia, equipo que ha accedido a los últimos siete round robin, sin poder sortear el ansiado pase a la serie final.

La derrota propinada por los Navegantes del Magallanes el domingo no sólo las elimino de competencia, sino que alargó a quince los años consecutivos en los que los naranjas no asisten a dicha instancia, siendo la segunda cadena más larga detrás de los 29 años de los Tiburones de La Guaira.

Los rapaces siguen sin encontrar la fórmula que les permita llevar el rendimiento de la ronda regular al todos contra todos, este año las cosas parecían ser distintas, la llegada de Eduardo Pérez, permitió oxigenar un dogout donde el talento emergente irrumpía para rememorar las glorias del pasado.

Incluso la apuesta de no traer a Austin Bibens-Dirkx, Dwayne Pollock y Joshua Schmidt, sirvió para medir el valor real de Yeiper Castillo y Wilfredo Boscán a tiempo completo como abridores.

Los zulianos son el único equipo en la actualidad en alcanzar la clasificación al round robín en siete ocasiones consecutivas, pero su registro de 35-74, dista de un equipo exitoso en ese periodo.

Ya durante la temporada regular, los naranjas habían saboreado las mieles del éxito gracias a una importación que sin mucha bulla caló en el gusto de la afición: Carlos Moncrief, Aaron Alther, Giovanni Urshela, Mark Minnicozzi, Eric Merzcer, Sergio Pérez, entre otros, quienes cargaron al equipo hasta la llegada o el acoplamiento de José Pirela, Ender Inciarte, Freddy Galvis, entre otros, incluso los rapaces tuvieron sorpresas agradables en el bate de Reggie Corona, Alí Castillo y Federico Arcia, quienes en las primeras semanas de campeonato fueron pieza fundamental de algunos triunfos.

Pero tras un inicio alentador, la salida de algunas piezas foráneas, el equipo jamás fue consistente en la segunda parte de la temporada. El mismo Eduardo Pérez lo confeso en su momento y las figuras que llegaron no produjeron lo necesario, iniciando así una crónica de lo que vendría más adelante.

La lotería de los refuerzos

Es bien sabido el mal augurio que han tenido los rapaces en esta instancia. La escogencia de los refuerzos más que ser eso, sirvió para paliar las deficiencias que venían presentando en la parte final de la temporada. La escogencia de Gabriel Noriega vino llena de comentarios negativos cuando uno observa el rendimiento de Alberto González con los Tiburones de La Guaira.

Pérez fue enfático en defender su escogencia, quería defensa más que promedio y Noriega fue la mejor opción entre los refuerzos.  Carlos Pérez y Daniel Mayora fueron escogidos en las siguientes vueltas para ser ellos los que se unirían a José Pírela, Jason Pridie y Anthony Gallas en la producción de carreras, si bien el primero fue una agradable noticia, el resto de los mencionados jamás pudieron aportar para la causa naranja.

Pírela fue parado por los Yankees de Nueva York, siendo está la baja más importante de la alineación de Pérez; Gallas y Pridie dejaron que desear y era más pitas que aplauso lo que recibían en el Luís Aparicio y Mayora recibió un golpe en su mano y fue poco lo que produjo.

El pitcheo que tanto éxito tuvo en la ronda regular no fue lo mismo en el todos contra todos y la directiva pago caro el no sumar un brazo más entre los peloteros disponibles, pues tampoco los importados hicieron el trabajo a excepción de Tim Dillard.

En otras ocasiones las Águilas llegaban diezmadas al round robin debido a que sus principales figuras sufrían restricciones, mientras que otros dejaban de jugar por decisión personal. Que hubiera sido de los zulianos si Alther hubiera jugado la temporada regular completa, si Urshela no se lesionará al igual que Minnicozzi, quizás una mejor posición a la hora de escoger refuerzos le hubiera permitido tomar piezas apetecibles y cambiar su destino.

Pero como dije anteriormente, los refuerzos han sido una grieta para la gerencia zuliana.

A continuación un balance de los últimos siete round robin de las Águilas, cortesía del periodista Gabriel Chávez, en reportaje publicado en el Diario La Verdad el día 15 de enero.

Eduardo Pérez recurrió a Ender Inciarte como tercer bate
en algunos encuentros en este Round Robin

Historia repetida

Round robin 2008-2009 (6-10)

Mánager: Eduardo Pérez

La primera clasificación de las seis consecutivas fue marcada por la irregularidad. La ofensiva solo pudo promediar colectivamente para .222 y no pudo ayudar al staff de lanzadores, que tuvo una buena efectividad de 3.16. Los "rapaces" tuvieron cuatro rachas distintas de dos derrotas. Los refuerzos Willie Otáñez y Alberto González se combinaron para un pobre promedio de bateo de .158.

Round robin 2009-2010 (7-9)

Mánager: Eduardo Pérez-Rómulo Oliveros

Los "emplumados" perdieron nueve de los primeros 12 encuentros; luego de ese 3-9 el mánager Eduardo Pérez fue cesanteado. Rómulo Oliveros lo sustituyó y completó con 4-1. Fue la última semifinal que jugaron Carlos González y Gerardo Parra. Hilvanaron dos seguidillas, una de tres y otra de cinco derrotas. José Santiago defraudó como uno de los sustitutos en la rotación.

Round robin 2010-2011 (4-12)

Mánager: Jody Davis

Empezaron con una barrida de dos partidos ante los Tigres de Aragua, pero luego perdieron siete en fila. La ofensiva hizo el trabajo con un respetable promedio colectivo de .292, pero el pitcheo falló, sobre todo el relevo, que malogró varias posibles victorias. La gerencia falló en las sustituciones; el criticado movimiento de Oswaldo Navarro apenas produjo dos imparables.

Round robin 2011-2012 (3-13)

Mánager: Lipso Nava (interino)

El cuerpo de lanzadores se vio debilitado por las salidas de Wilfredo Boscán, Adys Portillo, Ryan Reid, Diego Moreno y Marcos Tábata. Perdieron los primeros 11 juegos de forma consecutiva y marcaron su destino. Los sustitutos tomados en el draft presentaron un pobre rendimiento y poco pudieron aportar. Alcides Escobar y Hernán Iribarren, como aportes ofensivos, apenas pudieron ligar para .195 y .154, respectivamente.

Round robin 2012-2013 (5-11)

Mánager: Luis Dorante

Tuvieron un buen arranque, ganando cuatro de sus primeros seis encuentros, pero nuevamente se atravesó otra seguidilla de siete derrotas, con lo que se cerraban las opciones de meterse a la final. De nuevo adolecieron las salidas de peloteros importantes, sobre todo del cuerpo de serpentineros, con Álex Torres y Wilfredo Boscán. Álex Cabrera no pudo tapar la sensible baja de Evan Gattis.

Round robin 2013-2014 (5-11)

Mánager: Luis Dorante

Por primera vez en cinco años llegaron con todas sus figuras; una sola baja para enero: la de Álex Torres. El gran accionar en diciembre llenó de esperanzas a propios y extraños, pero el pobre relevo y algunas decisiones poco acertadas del cuerpo técnico volvieron a acabar con las opciones de meterse en la final. Las lesiones de Juan Carlos Linares y Marwin González dejaron un hueco difícil de tapar. Por tercera vez en los últimos cuatro años perdieron siete encuentros al hilo.

Eduardo Pérez cumplió al frente del equipo pese
a las adversidades en la segunda parte de la
temporada regular

Round robin 2014-2015 (5-8)*

Mánager: Eduardo Pérez

Llegaron a esta instancia clasificados en el tercer puesto luego de estar casi toda la temporada en el segundo peldaño. Las salidas de Giovanny Urshela y Aaron Altherr fueron algo que nunca lograron superar y llegaron a enero dando tumbos. Depositaron la confianza en Anthony Gallas y Jason Pridie, quienes nunca tomaron el ritmo. La ofensiva no estuvo a la par del pitcheo. Hilvanaron cuatro derrotas en fila. Gabriel Noriega como primera escogencia dejo mucho que desear. La ofensiva promedio 269 con dos jonrones y 19 remolcadas, mientras que el pitcheo presenta una efectividad colectiva de 4.31. La salida de José Pírela fue un golpe anímico en el dogout ya que era el máximo referente ante la ausencia de Ernesto Mejía que no jugó la temporada regular.

* Faltan tres juegos por culminar el Round Robin

@beisboladentro