domingo, 8 de marzo de 2009

Montrando la clase


Cuba sabe bien la importancia de arrancar con un triunfo en el Clásico Mundial de Béisbol. Una demostración de poderío tampoco está de más.

Los antillanos dieron muestras de su fortaleza el domingo al vencer 8-1 a Sudáfrica en su primer juego por el Grupo B en la segunda edición del Clásico. Cuba sacudió seis cuadrangulares, una nueva marca para el torneo.

"Fue un partido ofensivo, empezamos bien, siempre arriba y mantuvimos la diferencia … se conectaron varios jonrones y estamos listos para enfrentar el campeonato", dijo en rueda de prensa el jardinero Frederich Cepeda, autor de dos vuelacercas. "Es importante el resultado, empezar así siempre es bueno marcar que el equipo cubano está muy bien, empezar encima es importante".

El récord anterior de cuatro jonrones lo tenía República Dominicana desde el Clásico anterior.

México aprovechó al máximo la altura de 2.240 metros sobre el nivel del mar de Ciudad de México, sede del Foro Sol, donde la pelota usualmente viaja más lejos por el aire menos denso.

"Conocemos el estadio, en esta ciudad hemos jugado con Diablos Rojos, conocemos las características del terreno, pero no se puede engañar uno en tratar de buscar jonrones, esos salen", afirmó el manager de Cuba, Higinio Vélez. "(Cuba) es un equipo de buena defensa, con buen pitcheo, buena velocidad y ofensiva de corto y largo metraje y como decía, la bola viaja, pero viaja para todo el mundo, el que le de bien y con fuerza, da jonrón".

Héctor Olivera, Yulieski Gourriel, Alfredo Despaigne y Yoennis Céspedes también pegaron palos de vuelta entera para Cuba.

Aunque los jonrones fueron fundamentales, el triunfo del domingo no hubiera sido posible sin la excelente labor en la loma de Norge Luis Vera (1-0) quien no permitió hits hasta la quinta entrada y concluyó con una labor de seis innings en los que recibió dos hits y repartió seis ponches.

"Presenté un buen control, fui dominante", dijo Vera. "La adaptación en Puebla me ayudó a adaptarme muy bien a la altura".

Cuba se entrenó dos semanas en Puebla para aclimatarse a la altura de México.

Tomado de espndeportes.com

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