Los cuatro fantásticos (II parte)

Medias Blancas de Chicago

Candidatos: Luis Aparicio (SS), Nellie Fox (2B), Luke Appling (SS), Paul Konerko (1B), Harold Baines (BD), Orestes Miñoso (LF), Eddie Collins (2B), Frank Thomas (1B)

Mis escogencias fueron: Luis Aparicio, Nellie Fox, Paul Konerko y Frank Thomas.

Fox y Aparicio, la mejor combinación
de doble play de los patiblancos

Otro equipo con tradición y todos sus candidatos bateadores, lo que hace más difícil la elección. Aparicio fue el pionero del resurgir de las bases robadas en las mayores, su elegancia y constancia a la hora de fildear lo hicieron el mejor en su posición. Sustituyo a otra leyenda como Alfonso Carrasquel y se ganó a la afición con sus engarces. Novato del Año, siete veces líder en bases robadas, siete Guantes de Oro y un segundo lugar al premio MVP, fueron parte de su legado en el club patiblanco. El zuliano tuvo una pareja ideal para las doblematanzas como fue Nellie Fox, un pelotero que fue pieza vital en ese uno-dos del equipo en las décadas de 1950 y 1960. Fue MVP en 1959, ganando en cerrada votación a Aparicio. Frank Thomas fue el “Gran Dolor” para los lanzadores contrarios, un bateador selectivo capaz de tomar boletos constantemente, siempre se pensó que ganaría la Triple Corona de Bateo, pero jamás llego. Quizás ese año de 1994, cuando la huelga se atravesó en el camino de muchos. Thomas figura líder vitalicio en jonrones (448), remolcadas (1.465), anotadas (1.327) y dobles (447). Finalmente, Paul Konerko, quien sustituyo a Thomas en la ofensiva de los patiblancas en los siguientes años. Fue un pelotero respetado por sus compañeros y un incansable trabajador. Otrora prospecto de los Dodgers de Los Ángeles, Konerko estalla como jugador en 1999 cuando llego al equipo para ser el inicialista. Figura detrás de Thomas en algunos departamentos ofensivos.

Eddie Collins quedó fuera, aunque merecía su inclusión por encima de Fox, aun me respondo porque tome esa decisión.

Todos a excepción de Konerko, tienen su placa en Cooperstown.

Indios de Cleveland

Candidatos: Earl Averill (CF), Nap Lajoie (2B), Lou Boudreau (SS), Tris Speaker (CF), Larry Doby (CF), Jim Thome (1B), Bob Feller (P), Omar Vizquel (SS).

Mis escogencias fueron: Nap Lajoie, Larry Doby, Jim Thome y Bob Feller.

Bob Feller, hizo historia con un juego
sin hits en un partido inaugural

Otro equipo con mucha tradición y con meritos suficientes para tenerlos a todo en la lista. Lajoie fue uno de los segunda base más ofensivos que tuvo el béisbol a comienzos del siglo pasado, fue el termómetro con el cual se midió a otros camareros hasta la llegada de Roger Hornsby. Es líder vitalicio en imparables con 2.047, único miembro de la tribu con más de dos mil imparables. Al retirarse también fue líder en remolcadas con 919 (hoy es tercero). Larry Doby fue el primer negro en jugar en la Liga Americana, y al igual que Jackie Robinson tuvo que enfrentarse a la segregación racial, aunque todos hablan de Robinson y su lucha, Doby dejó dos lideratos en vuelacercas, uno en remolcadas y anotadas, llegado segundo al MVP en 1954. Fue el primer mánager de color en las mayores. Jim Thome es quizás el pelotero más subestimado pero que dejo números asombrosos en su carrera. A la calladita consiguió 612 cuadrangulares y le falto una remolcada para llegar a las 1.700. Con Cleveland jugó 13 temporadas siendo el máximo jonronero con 337, un tercera base promedio que fue mudado a la inicial para aprovechar su poderoso bate, fue pieza de la maquinaria de los años noventa a los que ayudo llegar a una Serie Mundial. Bob Feller el único lanzador del grupo, tiene la fortuna de haber debutado a los 16 años en 1936 y es el único pitcher en conseguir un juego sin hits en un Opening Day. En su carrera de 18 temporadas dejo marca de 266-162 con 3.25 de efectividad. Perdió tres años por prestar servicio militar que le quitó la posibilidad de alcanzar los 300 triunfos. Seis veces ganó 20 o más encuentros y estuvo entre los tres finalistas al MVP.

Dejar fuera a Earl Averill quien tiene varios registros no fue sencillo, como lo tiene Lou Boudreau o Tris Speaker. Omar Vizquel pensé que no tenía registros para competir, pero mire detalladamente su carrera de once temporadas con Cleveland y tiene números llamativos. Incluso por encima de Thome en algunos departamentos. Es el segundo mejor robador de la franquicia detrás de Kenny Lofton, aún así no me arrepiento de haberlo seleccionado, la competencia era obvia y no quise pecar de venezolano.

Tigres de Detroit

Candidatos: Miguel Cabrera (1B), Hank Greenberg (1B), Ty Cobb (CF), Al Kaline (RF), Sam Crawford (LF), Alan Trammell (SS), Charlie Gehringer (2B), Justin Verlander (P).

Mis escogencias fueron: Hank Greenberg, Ty Cobb, Al Kaline y Charlie Gehringer.

Ty Cobb ganó 12 coronas de bateo

Un equipo donde el bateo se impone sobre el pitcheo. Que candidatos habían y que escogencia tan complicada. Greenberg jugó en una época donde Jimmie Foxx y Lou Gehrig, habían tomado la batuta que Ruth dejo como slugger, pero aún así se las arreglo pese a los tres años de servicio militar para dejar promedio de 319 con 306 jonrones y 1.200 remolcadas con los bengalíes. Al retirarse era líder del club en los departamentos de cuadrangulares y remolcadas. Ty Cobb fue considerado el pelotero más completo en los comienzos de este deporte, era un espectáculo verlo jugar por su ferocidad en el terreno de juego que le hizo ganar enemigos. Líder vitalicio en promedio de las mayores con 366, obtuvo en doce ocasiones –nueve seguidas- el título de bateo del joven circuito, además de varios años líder en otros departamentos. En tres ocasiones bateo sobre los 400 y en 13 sobre los 350, la única vez que bateo por debajo de los 300 fue en su año de novato. Sus 4.189 hits representaron la marca más difícil de igualar hasta la llegada de Pete Rose. Pero sus 3.900 hits son la mayor cifra para un jugador de Detroit. Al Kaline fue otro gran slugger que jugó entre 1950 y 1970, arrebatándole a Greenberg los lideratos en vuelacercas y remolcadas. Nunca ganó un MVP, pero consiguió 3.007 imparables en su carrera, remolcar 1.583 carreras, con solamente tres temporadas de cien o más remolques y su máxima cantidad de jonrones fue de 29, pero aún así consiguió 399. Charlie Gehringer fue un destacado camarero que junto a Ty Cobb eran los rostros más visibles del club.

Dejar fuera a Sam Crawford quien también tiene un historial importante no fue sencillo.

¿Y Miguel Cabrera?, bueno, si esta elección hubiera sido en 2017 o 2018, el aragüeño estaría en esta lista, no menosprecio lo hecho por el compatriota quien tiene ocho años dentro de la franquicia felina. Sus números en ese periodo son letales y lo ubicarán en un lapso de dos años dentro de los mejores bateadores no sólo del béisbol sino del equipo de la ciudad motor. Tiene 257 jonrones, que lo ubican quinto en ese departamento y sus 863 remolcadas, lo mantienen en el puesto 13.

Reales de Kansas City

Candidatos: George Brett (3B), Dan Quisenberry (P), Alex Gordon (LF), Bret Saberhagen (P), Hal McRae (BD), Frank White (2B), Amos Otis (OF), Willie Wilson (OF).

Mis escogencias fueron: George Brett, Dan Quisenberry, Bret Saberhagen y Kevin Appier, a quien tome fuera de la boleta.

George Brett, ganador de tres títulos de bateo

Que difícil escoger entre tan buenos bateadores y lanzadores de los monarcas. Solo Alex Gordon es el único activo del grupo y vaya legado está construyendo. Brett es y será la cara más famosa de la franquicia, único pelotero en ganar tres coronas de bateo en tres décadas distintas, miembro del club de los tres mil y un bateador selectivo. Dejo promedio de 305 con 317 jonrones y 1.595 remolcadas fue parte del equipo que conquisto la Serie Mundial de 1985. Quisenberry fue uno de cerradores más exitosos del béisbol durante la primera parte de la década de los años 80. En dicho periodo alcanzo cinco lideratos en rescates, pero su estela se apago rápidamente y no fue capaz de mantener su puesto, perdiéndolo ante Steve Farr, aún así obtuvo 238 salvados, que lo mantuvo líder en dicho departamento hasta la llegada de Jeff Montgomery. Bret Saberhagen ganó su primer premio Cy Young en su segunda temporada como pelotero y cuatro años después ganaría el segundo, en ese lapso de seis años, muchos pensaron que Saberhagen despegaría por completo y se posicionaría como uno de los mejores lanzadores, pero las lesiones mermaron su desempeño y tampoco contó con el respaldo que deseaba. Solo tuvo dos años de veinte triunfos  y tres sobre las 14 victorias. Kevin Appier fue el pelotero que escogí fuera de las papeletas. Fue un lanzador exitoso en su periplo con Kansas City, tercero en la votación al Novato del Año en 1990, tuvo siete temporadas de 14 o más triunfos, con un tope de 18. Se ubica cuarto en triunfos con 115, mientras que sus 1.458 abanicados, son la máxima cantidad dentro del club. Una marca que luce inalcanzable por los próximos años.

Mellizos de Minnesota

Candidatos: Bert Blyleven (P), Harmon Killebrew (1B), Rod Carew (1B), Joe Mauer (C), Walter Johnson (P), Tony Oliva (OF), Jim Kaat (P), Kirby Puckett (CF).

Mis escogencias fueron: Harmon Killebrew, Rod Carew, Walter Johnson y Kirby Puckett.

Killebrew

Muchos nombres merecedores de estar entre los cuatro fantásticos. Killebrew fue un slugger que hizo sentir su fuerza entre los años de 1954 y 1974. Inicio su carrera con los Senadores de Washington, antes de que el equipo pasara a llamarse Mellizos de Minnesota. Debuto a los 18 años, pero fue en su quinta temporada cuando exploto al recibir la titularidad. Siete temporadas con 40 o más jonrones de las cuales seis de ellas le sirvieron para ser líder en ese departamento en el joven circuito. Un premio de MVP en sus vitrinas y nueve campañas con 100 o más impulsadas –tres de ellas para ser líder en la Americana-, son parte de sus logros. Lidera a los Mellizos en jonrones y remolcadas de por vida. Rod Carew fue un excelso bateador en su carrera y su constancia se hizo sentir durante su periplo en Minnesota, conquistando siete títulos de bateo –cuatro consecutivos-, cuatro veces bateo 200 o más hits, con un tope de 239, además de un Novato del Año y un MVP. Walter Johnson fue uno de los mejores lanzadores del béisbol a comienzos del siglo pasado. 417 victorias y 3.509 abanicados certifican su paso cuando los lanzadores eran dominantes en el juego. Compitió contra Christy Matthewson y Cy Young por ver quién era el mejor pitcher en la década de los años 10 y 20. Dos veces gano treinta o más juegos y en cinco más de 25 victorias. Sus 110 blanqueos son la mayor cantidad para el béisbol. Kirby Puckett jugó solamente doce temporadas, su carrera se vio recortada a consecuencia de un pelotazo en el ojo que le causaría un glaucoma que le daño la visión en dicho ojo. Pero su grandeza en el terreno será recordada pese a ser un pelotero de sobrepeso. Obtuvo una corona de bateo, cuatro lideratos de hits, cinco temporadas de 200 o más hits, un liderato de remolcadas y varios Guantes de Oro y Bate de Plata. Con todo eso, es segundo en el departamento histórico de hits, tercero en dobles, sexto en vuelacercas y tercero en remolcadas. Se imaginan si no hubiera tenido ese bolazo accidental, se retiro a los 35 años y aún tenía condiciones para tres años más.

Articulo relacionado

Los cuatro fantásticos (I Parte)

@beisboladentro