Los Navegantes del Magallanes,
representantes de Venezuela en la Serie del Caribe, cerraron con balance de dos
triunfos y una derrota la primera ronda de encuentros. Los venezolanos sin
contar el resultado entre Leones del Escogido (República Dominicana) y Yaquis
de Ciudad Obregón (México), se mantienen en el segundo puesto, posición
privilegiada si tomamos en cuenta el nuevo formato del evento latinoamericano.
A pesar del escaso material
para armar un equipo competitivo la gerencia turca puede sentirse tranquila del
resultado que ha arrojado esta primera parte del campeonato.
El Magallanes que está en
México no tiene nada que envidiarle al que se coronó campeón hace cinco días.
Si bien no hay figuras resaltantes, los peloteros con que cuenta la nave son en
su mayoría veteranos que saben cómo jugar este tipo de evento, factor que puede
ser determinante en series cortas.
Incluso me atrevo a afirmar que
este equipo me recuerda mucho al de los Tigres de Aragua de 2009, quienes sin
estrellas, llegaron a Mexicali para ser campeones.
De hecho, Robert Pérez, Alex
Romero y Víctor Moreno fueron parte de ese equipo que se coronó hace cuatro
años.
Quizás la historia pueda
repetirse en Hermosillo. Magallanes solo llevo a diez peloteros originales y a
18 refuerzos, siendo acá donde radican las esperanzas de conseguir no sólo su
tercer gallardete caribeño, sino el octavo para el país.
Hasta los momentos los
dirigidos por Luis Sojo, quien está en su primer evento en calidad de dirigente
han sido positivos.
Robert Pérez es el mejor
bateador del club con 333 y un vuelacerca. Mientras que Ken Ray ha destacado en
el pitcheo con nueve abanicados en seis entradas de labor.
Venezuela además comanda el
renglón de vuelacercas con cinco, pese a que su ofensiva registra un endeble
153 de promedio.
Es claro, que los ajustes se
seguirán tomando para afrontar una segunda fase decisiva en la cual las
opciones para conquistar el cetro caribeño son reales.
@beisboladentro
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