lunes, 17 de enero de 2011

Llegará a ser inmortal Juan González

Cuando se conoció que Juan González iba a aparecer en la boleta para la ser exaltado al Salón de la Fama, los Vigilantes de Texas enviaron una carpeta brillosa para promocionar la candidatura de Igor; la misma tenía testimonios de sus ex compañeros de equipo y del antiguo dueño del equipo, el ex Presidente de los Estados Unidos, George W. Bush.

Con tanto pergamino, no cabía duda que Texas cumplió su cometido para que los periodistas supieran que Juan González es material de Cooperstown, ya que además se sumaban dos premios JMV y sus 434 cuadrangulares. Pero lo cierto es que de nada sirvió tales hechos, el sufrimiento de González solo marca una pena capital de un año, ya que las acusaciones de esteroides pesan en un pelotero que aún no ha afirmado si fue consumidor o no.

Lo cierto es que esta sexta entrega sobre los peloteros que “merecen” su placa en el Salón de la Fama, tiene el turno del puertorriqueño Juan Igor González sin duda uno de los máximos exponentes latinoamericanos que tuvo el béisbol a comienzos de la década de los noventa.

Un pelotero que asombro con sus dos títulos de jonronero en años sucesivos y que implanto un registro de impulsadas antes del Juego de Estrellas, ese pelotero que iba rumbo a los 500 cuadrangulares y que con seguridad terminaría inmortalizado junto a las leyendas del béisbol.

Hoy, González se debate por tratar de convencer a la BBWAA que jamás consumió esteroides, pero el silencio es la tumba de este jugador, que si observamos sus números y carrera que detallare a continuación, estuvo plagada de muchas lesiones y que ocasionalmente maravilla a más de uno con una temporada por encima de lo esperado.

Un pelotero en franco ascenso

González fue firmado a los 16 años por la organización de los Rangers de Texas el 30 de mayo de 1986, su apodo de Igor se debió a su fuerza y gusto por un personaje de la Isla llamado Sol Logroño. Su estreno en las mayores con Texas, sucedió el 1 de septiembre de 1989, contaba apenas con 19 años y venía de dejar números alentadores en las menores; la revista Baseball America, consideraba al joven pelotero una de las piezas de mayor futuro en la divisa tejana, por encima de Iván Rodríguez, Sammy Sosa, Mark Whitten y compañía.

Durante 1989 y 1990, González compartió su accionar entre Texas y las ligas menores, hasta que en 1991 recibe la oportunidad.

En 1992 sería el año de su explosión al comandar la Liga Americana en cuadrangulares con 43 (uno por encima de Mark McGwire), bateando además para 260 y 109 remolcadas, que le valieron su primer Bate de Plata, además figuro en el puesto 16 para el MVP que gano Dennis Eckersley de Oakland.

Al siguiente año, el joven de 23 años ratifica lo hecho en 1992, al liderar nuevamente la categoría de cuadrangulares, esta vez con 46 (superando por uno a Ken Griffey Jr), añadiendo 118 remolcadas, 310 de bateo y 632 de Slugging que lo colocaron como líder de esa última categoría.

Ese año asiste a su primer Juego de Estrellas donde gano el Derby de los Cuadrangulares con 7, además de su segundo Bate de Plata y está vez ocupo el cuarto lugar en la votación al MVP del joven circuito que ganaría Frank Thomas.

Ofensiva de poder

En Texas, González compartió con Rafael Palmeiro, José Canseco e Iván Rodríguez un cuarteto latinoamericano de poder, antes de la ida de Palmeiro a Baltimore en 1994, Texas sumo el bate de Will Clark para ayudar a González y Canseco en la producción de carreras.

Aunque en 1994 y 1995, los números de González fueron “discretos”, bateando 275-19-85 y 295-27-82, volvió a primera plana en 1996 cuando ganaría el MVP de la Americana; ese año bateo para 314 con 47 cuadrangulares (igualando la marca para un latino) y 144 carreras impulsadas. Le gano el premio a Alex Rodríguez por tres votos 290 a 287.

Ese año inicio una cadena de tres años sucesivos dando 40 o más jonrones y cuatro de 100 o más remolcadas. Además de ayudar a Texas a ingresar por primera vez en los play off en su historia; ese año cayeron en primera ronda ante los Yankees de Nueva York. González se lució en su estreno al batear para 438, cinco cuadrangulares y nueve remolcadas.

En las siguientes tres temporadas Texas accedió a los play off en dos ocasiones más cayendo en ambas ante Nueva York, por su parte González siguió aumentando su producción ofensiva, obteniendo en 1998 su segundo MVP al batear para 318 con 45 jonrones y fue líder en impulsadas (157) y dobles con 50. Ese año estableció un nuevo registro de remolcadas antes de la pausa de mitad de temporada (101), además de asistir al Juego de Estrellas.

Nuevos aires, números discretos

Con todos sus pergaminos, los Vigilantes deciden prescindir de los servicios del puertorriqueño y esté llega a Detroit en el año 2000, donde batearía para 289-22-67, números discretos para el jugador que venía de temporadas de 40 cuadrangulares y 100 o más remolcadas; González jamás se sintió cómodo jugando en el nuevo estadio de Detroit el Comerica Park, donde señalo que era difícil dar cuadrangulares en ese parque.

Al siguiente año prueba suerte con los Indios de Cleveland, allí su carrera despega nuevamente al batear para 325, 35 cuadrangulares y 140 impulsadas. Nuevamente es convocado a un Juego de Estrellas (su tercero), y obtiene su sexto Bate de Plata. Finalizaría quinto en la escogencia del MVP que recayó en Ichiro Suzuki.

Opta por la agencia libre en espera de un megacontrato a sus 32 años y es Texas quien lo adquiere, en su regreso a la ciudad que lo vio nacer, González tiene números totalmente discretos en parte por las lesiones que lo aquejaron en las campañas de 2002 y 2003; en la primera batearía para 282-8-35 en 70 compromisos y en la segunda 294-24-70 en 82 encuentros. Lesiones en su rodilla y su espalda lo merman duramente y Texas lo deja libre. El camino del jugador se encuentra en un limbo, pues aseguran que su mejor momento ya pasó.

En 2004 trata de convencer a muchos que aún tiene condiciones y Kansas City le extiende un contrato, allí en 33 encuentros deja nuevamente números inferiores de 276-5-17; una lesión en su espalda, le imposibilita de jugar.

Su última campaña la vivió en 2005, con Cleveland que lo contrato, a pesar del régimen que venía haciendo el jugador durante la temporada muerta, su debut se dio en mayo, específicamente el 31 cuando en su único turno al bate se desgarró su bíceps femoral medial derecho totalmente fuera de hueso en las articulación de la rodilla, poniéndolo fuera de la temporada por última vez.

En 2008, intento nuevamente volver a las mayores a los 38 años de edad, San Luís lo invita a los entrenamientos, y a pesar de hacer un buen spring training bateando para 308 con un cuadrangular y 5 remolcadas en nueve juegos, fue puesto en la lista de inactivos con una lesión abdominal, San Luís prometió integrarlo al equipo una vez estuviera sano, pero González opto por no jugar más.

Esteroides y adiós a la inmortalidad

El jugador nacido en Puerto Rico es nombrado en el libro de José Canseco, donde afirma el cubano haberle inyectado esteroides al boricua; además aparece entre los sospechosos en el informe Mitchell, debido a un incidente ocurrido en 2001 donde su entrenador Ángel Presinal le fue confiscado un morral con esteroides (para esa época legales) que iba a ser usado por González. El pelotero después desmintió a su entrenador alegando que ese morral era de Presinal y no de él.

Cabe destacar que Presinal fue vetado del béisbol por dar hormonas de crecimiento a varios jugadores.

La bolsa que contenía Soladek (un analgésico), Dolo-neurobion (complejo vitamínico B) y Clenbuterol (estimulante similar a la efedrina).

A pesar de ese incidente el jugador afirma que jamás ha usado esteroides, refuto el informe Mitchell y dejo entrever que varios gerentes conocían el uso de sustancias para mejorar el rendimiento por parte de sus jugadores.

El pelotero en reiteradas ocasiones ha dicho que desea someterse a pruebas para demostrar su inocencia. “No tengo por qué ocultar nada; nunca me ofrecí, aquí estoy cuando quieran hacerme una prueba. El que no tiene hecha, no tiene sospechas”.

A pesar de eso el pelotero, aún no se ha determinado si realmente consumió o no sustancias estimulantes, lo cierto es que su nombre figuro en el informe de George Mitchell, además Canseco detalla cómo lo inició en los esteroides, después de su salida de Texas el pelotero jamás logro los mismos numeritos que dejo con los tejanos en sus primeras 11 temporadas, incluso en su regreso a la ciudad sus números descendieron considerablemente.

Aún así en 2011 en su primera comparecencia en las boletas apenas recibió un 5.2% para mantenerse vivo para el próximo año (recuerden que para seguir en las boletas el jugador debe mantenerse por encima del 5%).

Cuáles son las probabilidades de González de seguir por lo menos otro año vivo para ser un inmortal, es obvio que son nulas, sabiendo que vendrán más candidatos en los siguientes años, a pesar de las lesiones y de su salida repentina de los diamantes González decayó considerablemente a partir 1999, nunca más fue ese referente ofensivo de años anteriores, las lesiones acortaron su carrera prometedora, nunca sabremos si realmente ese González de 1989 a 1998 era el González de esteroides o el verdadero luchador en el terreno de juego; lo cierto es que su acelerado final fue igual como su accidentado matrimonio con la cantante boricua Olga Tañon.

Pergaminos

3 veces seleccionado al Juego de Estrellas (1993, 1998 y 2001)

6 veces ganador del Bate de Plata (1992, 1993, 1996, 1997, 1998 y 2001)

2 veces Jugador Más Valioso de la Liga Americana (1996 y 1998)

3 veces finalizo en el top 10 del MVP

Está en el puesto 39 entre los mejores jonroneros con 434

Ganó en 1993 el Derby de los Jonrones

2 veces líder en cuadrangulares en la Liga Americana (1992 y 1993)

5 temporadas con 40 o más jonrones (1992-43; 1993-46; 1996-47; 1997-42; 1998-45)

Finalizo en el top cinco en impulsadas en cinco ocasiones

En ocho de sus 17 temporadas remolco cien o más carreras

Segundo jugador en remolcar 100 o más carreras antes del Juego de Estrellas; Hank Greenberg remolcó 103

Más impulsadas en un mes (abril 35 en 1998).

Noveno jugador en llegar a los 300 cuadrangulares con 28 años y 334 días

Empatado con Ken Griffey Jr, con más cuadrangulares en una Serie Divisional con 5



@Adonisalejandro

4 comentarios:

  1. Tuve la oportunidad de ver a Juan jugar en la Liga Invernal de Puerto Rico. Y a los 19 años era campeón de cuadrangulares eso cuando era tan flaco como el palo de una escoba antes de tener el físico tan impresionante. Simplemente una lastima.

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  2. Bueno ya tu tendrás tus propias conclusiones sobre que le sucedió a González

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  3. Lo vi jugar recientemente en la liga doble A de Puerto Rico y no es la sombra de lo que una vez fue ...

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  4. Imagínate en su momento fue una gloria para los latinoamericanos, lastima que su carrera culmino abruptamente

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