Era una tarde del lunes 29 de mayo de 1995, cuando a las 5:07 de la tarde, el Kigdome, hogar de los Marineros de Seattle, abría sus puertas para el encuentro entre los Yankees de Nueva York y los Marineros.
MVP por los Yankees en el sistema de Ligas Menores |
Los Yankees habían perdido días atrás a su campo corto el dominicano Tony Fernández por una lesión y habían probado a Kevin Elster, Robert Eenhoorn y Dave Silvestri, los resultados no fueron halagadores y decidieron llamar a un prospecto de sus granjas que al concluir ese año quedó electo el Más Valioso en el circuito de ligas menores de la organización, su nombre: Derek Sanderson Jeter.
Ese día el manager Buck Showalter decide alinear al joven promesa de 21 años en el campo corto y aunque se fue 5-0 con un ponche. Era el inicio de una prometedora carrera que hoy, 16 años después lo tiene cerca de convertirse en el primer miembro formado en la organización neoyorquina que llega a los 3000 hits.
Su experiencia en las mayores fue solamente de quince partidos, al año siguiente la organización le entrega la posición de campo corto y cumplió a cabalidad al conquistar el Novato del Año, luego de batear para 314, 10 cuadrangulares y 78 remolcadas en 157 partidos.
Jeter conquistó el premio de manera unánime al imponerse sobre James Baldwin, Tony Clark, Rocky Coppinger, José Rosado, Darin Erstad, Tony Batista, Tim Crabtree y Jeff D´Amico. Sacando a Jeter, todos estos peloteros tuvieron una carrera efímera en las mayores, con una que otra temporada por encima de las expectativas.
A escasos días de su cumpleaños 37, una edad en la que la mayoría de los peloteros piensan en el retiro; Derek Jeter está consciente que esa palabra no está en su diccionario por lo menos en los próximos tres años.
Una estrella antes de firma
En 1992 los Yankees ni soñaban con poder seleccionar al campo corto nacido en Pequannock, New Jersey, su estatus de prospecto A-1 lo hacía un trofeo codiciado en el draft de ese año; los Astros de Houston era la franquicia que tendría el honor de elegir primero ese año, por lo que se suponía lo escogerían con toda seguridad.
Los reportes de Hal Newhouser, scouts de los Astros, organización que venía siguiendo a Jeter desde la high school aseguraban que como pelotero y como persona, es muy especial.
Calentando ante su debut ante Seattle |
Los ejecutivos de Houston pensaron que con el estatus de Jeter, éste exigiría más de un millón de dólares como bono, ya que los Yankees habían pagado un millón 550 mil al número uno de 1991, Brian Taylor. Por lo cual no escogieron al campo corto y se decidieron por el primera base y receptor Phil Nevin, a quien le dieron 700 mil dólares.
“Honestamente, creí que Houston se lo llevaría”, aseguró en ese entonces el director de scouts de Nueva York, Brian Sabean.
Los Yankees escogerían ese año de sextos y lo más asombroso fue que los equipos que antecedieron a Nueva York, no escogieron a Jeter. Cleveland se llevo al pitcher Paul Shuey (650 mil dólares), Montreal obtuvo al lanzador Derek Wallace (550 mil), Baltimore al jardinero Jeffrey Hammonds (400 mil) y Cincinnati al jardinero Chad Mottola (400 mil).
Ante tanto asombro la gente de Nueva York se preguntaba que sucedía, cuál era el misterio. “Me vi tentado a averiguar si Derek (Jeter) estaba lesionado o si no iba a firmar”, relató Sabean. Aunque no contaba con suficiente tiempo, Sabean se arriesgo y firmó a Jeter por 700 mil dólares. Al enterarse Newhouser de la firma, este renunció a sus labores con Houston… imagínense que hubiera sucedido si los Astros hubieran tomado a Jeter, el impacto hubiera sido un vuelco total que nunca sabremos.
Lo que sí sabemos es que 19 años después, Jeter es el líder de mayor jerarquía que han tenido los Yankees en el terreno. Siete Series Mundiales, cinco ganadas. Astros, Indios, Expos, Orioles y Rojos, no han ganado un campeonato en dicho periodo.
En el umbral de las leyendas
Desde 2009 el capitán de los Yankees es el líder en hits de todos los tiempos entre los campo cortos, superando a los venezolanos Omar Vizquel (2.679) y Luís Aparicio (2.673). Entre sus logros encabeza a los Yankees en turnos (9.542), hits (2.984) y bases robadas (328), además de aparecer entre los primeros cinco en otras categorías (esto es sin incluir el partido del día jueves).
Otros logros alcanzados en su legendaria carrera son los cinco anillos de Serie Mundial, Novato del Año, once Juegos de Estrellas, cinco Guantes de Oro, cuatro Bates de Plata, dos premios Hank Aaron, un premio Roberto Clemente, 185 hits en playoffs (récord) y más de 200 millones de dólares en salarios.
Cooperstown solo aguarda el momento en que el campo corto anuncie su retiro y sea elegible para ser exaltado. ¿Será Derek Jeter el primer miembro de Cooperstown exaltado de manera unánime?, nadie en la historia ha logrado tan merecido honor.
Incluso su número 2 estaba predestinado para que lo usara, desde el primer día que piso el terreno de juego su leyenda se estaba gestando. Si se retira hoy Nueva York sería la primera franquicia que tiene sus primeros números retirados, quedando el número seis disponible, aunque pudiera ser retirado si deciden honrar a Joe Torre, manager que durante doce años trajo la mística ganadora a la franquicia.
El primer Yankee en el club de los 3000
Repasemos la historia de la franquicia a rayas: Lou Gehrig, Joe DiMaggio, Mickey Mantle, Yogi Berra, Elston Howard, Phil Rizzuto, Thurman Munson, Don Mattingly y Bernie Williams, grandes hiteadores en la historia de la organización, todos ellos formados en las granjas del equipo y nadie se ha acercado a la gesta que Jeter está por conseguir.
Sera el primer miembro de la organización en conseguir los tres mil imparables, dejando atrás a otras luminarias como Lou Gehrig (2.721), Babe Ruth (2.518), Mickey Mantle (2.415), Bernie Williams (2.336), Don Mattingly (2.153), Yogi Berra (2.148), Bill Dickey (1.969) y Earle Combs (1.866).
Tomando en cuenta su edad y con un contrato garantizado por dos años más, es casi seguro que Jeter termine entre los diez mayores hiteadores de la historia. Para ir un poco más lejos; si fuese el Jeter de hace cuatro años, podría asegurar que finalizaría su carrera cercano a los 4000 imparables.
Además será el pelotero número 14 y el primero desde Craig Biggio (28 de junio de 2007) con tres mil incogibles para un mismo club. Los otros son Ty Cobb (Detroit), Stan Musial (San Luís), Hank Aaron (Bravos de Atlanta / Milwaukee), Carl Yastrzemski (Boston), Pete Rose (Cincinnati), Willie Mays (San Francisco), Cal Ripken (Baltimore), George Brett (Kansas City), Robin Yount (Milwaukee), Tony Gwynn (San Diego), Al Kaline (Detroit) y Roberto Clemente (Pittsburgh).
3000 hits sin un título de bateo = 3000 hits con más campeonatos
Al ingresar al club de los tres mil hits, Jeter no podrá evitar estar en una amplia y prestigiosa lista de jugadores con dicha cantidad de hits, sin haber ganado el título de bateo en su carrera. Allí están Lou Brock, Craig Biggio, Cal Ripken, Paul Molitor, Eddie Murray, Dave Winfield, Robin Yount, Eddie Collins, Rickey Henderson y Rafael Palmeiro. En dos ocasiones ha sido segundo (1999 y 2006) y tercero en otras dos (2003 y 2009).
En contraparte Jeter será el miembro con más anillos de campeonatos conseguidos (cinco) y con la posibilidad de ampliarlo, tomando en cuenta que los Yankees han sido favoritos al título todos los años.
Solamente cuatro jugadores estarán en las mismas condiciones que Jeter, Eddie Collins quien obtuvo cuatro cetros, tres con los Atléticos de Filadelfia y uno con los Medias Blancas de Chicago. Pete Rose tuvo tres campeonatos, dos con Cincinnati y uno con Filadelfia. Stan Musial tiene tres con San Luís y Tris Speaker también con tres, de los cuales dos con Boston y uno con Cleveland.
El Yankee más valioso de todos los tiempos
Babe Ruth es sin discusión el número uno en la historia de los Yankees. Joe DiMaggio es el más completo en todos los departamentos, menos el de bateo. Mickey Mantle el de mayor habilidad natural. Bill Dickey, un cátcher sin parangón. Lou Gehrig ha sido el más valioso por su grandeza como jugador, tenía el orgullo de ser un Yankee. Derek Jeter es quien quizás, reúna todas las habilidades de estas leyendas; desde su estreno Nueva York volvió por la ruta de los campeonatos esquivos durante la década de los años 80. Orgulloso de ser un Yankee, Jeter ha demostrado el valor de ser un pelotero de esta franquicia, sin importar metas personales ha sabido llevar su juego de pelota y haberse ganado un corazón dentro de la fanaticada que lo idolatra por su espíritu de victoria.
“Hasta no haber golpeado mil bolas sin error, siempre tendrás algo en que trabajar”, Derek Jeter.
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