A escasos días de iniciarse una nueva temporada de las Grandes Ligas, la representación criolla que está en el Spring Training se aprestan a iniciar una nueva campaña donde van en busca de lograr establecer las metas deseadas.
En esta primera entrega iré presentando a los representantes que engalanaran la campaña 2011, posición por posición, iniciando con la receptoría, posición que ha sido importante en el progreso de un partido.
Observar a un venezolano detrás del plato dirigiendo un encuentro de pelota en las mayores se ha vuelto un evento rutinario en los últimos años. En 1977 Baudilio Díaz se convirtió en el primer receptor que llego al Big Show, para ese entonces, con 24 años se abría paso en las mayores; convirtiéndose en la referencia para los venezolanos en esa posición.
Doce años transcurrieron para que otro careta se estrenará en las mayores, fue en 1990 cuando Carlos Hernández haría lo propio con los Dodgers de Los Ángeles, en ese entonces, Hernández era el receptor suplente de Baudilio Díaz en los Leones del Caracas, en la pelota venezolana.
Desde entonces, el incremento paulatino de caretas en las Grandes Ligas ha sido considerable, alcanzando su cenit el año pasado cuando 15 compatriotas participaron en al menos un partido, y seis de ellos jugaron más de 80 encuentros.
Encontrar un criollo en esta posición que pueda competir con los mejores receptores defensivos en las mayores no ha sido fácil, hasta los momentos el único que se ha acercado a ellos ha sido Henry Blanco, quien se ha convertido en uno de los mejores receptores defensivos del béisbol, el derecho lidero a los venezolanos en porcentaje de out en intento de robo con 50% en 22 oportunidades. Un ejemplo del rol importante de Blanco, es que sin él en la lista los receptores criollos retiraron al 26% de los corredores que intentaron estafar una base.
A pesar de esa cifra, aún está por debajo del promedio de un careta de las mayores, en parte por figuras como Wilson Ramos (11-1), Francisco Cervelli (64-9) y Víctor Martínez quien tuvo el peor porcentaje de las mayores, entre los jugadores titulares de esa posición con 21.4% (126-27).
Los titulares
El grupo lo encabeza Ramón Hernández quien a sus 34 años participara en su campaña 13, desde su debut en 1999 con los Atléticos de Oakland, Hernández demostró los pergaminos que lo hicieron prospecto del equipo y que lo llevará a ganar dos títulos de bateo en las menores.
Siempre ha estado en rol titular y a pesar de que en las últimas dos campañas con Cincinnati no ha jugado al 100% debido a las lesiones, aún es un bateador respetado por su don de liderazgo en el terreno de juego. Su carrera ha estado repartida con Oakland (1999-2003), San Diego (2004-2005), Baltimore (2006-2008) y Cincinnati (2009- ). De por vida, el cumanés batea para 265 con 149 cuadrangulares y 687 remolcadas.
Su mejor año fue en 2003, cuando recibió hasta los momentos su única invitación al Juego de Estrellas; ese año bateo para 273 con 21 jonrones y 78 remolcadas con Oakland; en 2006 con Baltimore tuvo un año fenomenal culmino con 91 remolcadas y 23 cuadrangulares. Para el 2011, Hernández desea estar nuevamente en la élite y volver a jugar más de 100 encuentros (la última vez fue en 2008) y estar alejado de las lesiones.
En cuanto a su porcentaje el año pasado solo atrapo a 18 robadores de base para un 34% y de por vida tiene un 30%, habiendo capturado a 308 corredores. Su porcentaje de fildeo se ubica en 989.
Víctor Martínez es otro de los representantes que gracias a su bate está dentro del grupo de receptores más ofensivos en las mayores.
Iniciará su décima campaña en las mayores con un nuevo equipo los Tigres de Detroit, donde se alternará en la receptoría, la inicial y como designado, siendo esta última la posición que más defenderá ya que fue contratado por su tórrida ofensiva, más no por su endeble defensa.
De por vida Martínez exhibe promedio de 300 con 131 jonrones y 638 producidas. Ha participado en cuatro Juego de Estrellas (2004, 07,09-10), y en 2004 ganó un Bate de Plata. Con 32 años comienza una nueva faena en su carrera; no será receptor todos los días y su rol se verá más en otras posiciones. Ha estado con Cleveland (2002-2009) y con Boston (2009-2010). Su mejor año fue 2007 cuando bateo para 301 con 25 cuadrangulares y 114 remolcadas (estas dos cifras topes en su carrera). Exhibe un promedio defensivo de 993 y ha retirado al 24% de lo que han robado base.
Yorvit Torrealba es otro que ha trabajado arduamente para ser titular en las mayores. El hoy mascoteador de los Rangers de Texas fue el que más se le acercó a Blanco en cuanto a su defensa al momento de evitar robos. El año pasado saco a 22 de los 60 jugadores que intentaron hurtarle una base para un 37%.
En su carrera ha tenido altos y bajos, pero aún así ha demostrado que es un trabajador y la recompensa se ve con el rol que ocupará con Texas esta campaña. Esta será la cuarta vez que toma el rol de titular, solo en una ocasión cubrió más de cien encuentros y fue en 2007 con Colorado cuando participo en 113 compromisos.
No es un bateador de promedio, pero es oportuno en los momentos grandes, y su defensa es garantía detrás del plato. Está en su campaña once, que inicio con San Francisco (2001-2005) donde bateo para 251 con 13 jonrones y 75 remolcadas. En Seattle estuvo media temporada (2005), cuando San Francisco lo envía a mediados de campaña, allí batearía para 241 con 2 jonrones y 8 remolcadas en 42 compromisos. Llega a Colorado (2006-2009) donde tendría un rol más importante de su carrera; allí batearía 258 con 23 vuelacercas y 152 impulsadas.
En cuanto a su defensa ha logrado retirar un 47% (41-19) de los robadores en 2003 con San Francisco y en 2006 con Colorado un 40% (31-21), por lo cual a pesar de su altas y bajas es una apuesta para Texas esta campaña. Defensivamente exhibe un 995 de promedio.
La camada
Wilson Ramos, Humberto Quintero y Miguel Montero representan la nueva camada de receptores que se abren paso en las mayores. Ramos quien está siendo candidato a ser el receptor de todos los días en Washington por encima del veterano y seguro miembro del Salón de la Fama, Iván Rodríguez ha sorprendido a todos en este entrenamiento primaveral.
Llego el año pasado procedente de Minnesota, su fama bien precedida le auguraba un futuro promisorio en Minnesota, pero la presencia por un buen tiempo de Joe Mauer, le quitaría juego, por lo cual es cambiado a Washington donde ha sabido aprovechar las oportunidades y está a un plus de lograr su anhelado sueño: Ser receptor de un equipo en las mayores.
El año pasado entre Minnesota y Washington, bateo para 278 con un cuadrangular y cinco remolcadas en 22 compromisos. Con 23 años y con dos equipos ya en su haber, Wilson Ramos está cerca de convertirse en un boom mediático y en una ciudad como Washington su fama puede cimentarse y cuidado si otros equipos lo tienen en la mira. El solo hecho de quitar a Iván Rodríguez quien está buscando la meta de los tres mil imparables y con un camino abonado al Salón de la Fama, es un indicio de las capacidades del venezolano.
En el aspecto defensivo exhibe un promedio inmaculado, pero debe trabajar en el aspecto de robos donde tiene un pésimo 9% (11-1).
Desde su llegada a los Astros de Houston en 2005, Humberto Quintero se ha fajado para obtener su titularidad con los siderales. En los últimos tres años su nombre ha sonado constantemente para ocupar ese rol, pero a última hora alguien se le ha atravesado y le ha quitado el manjar de la boca.
El año pasado tuvo la mayor cantidad de encuentros desde que es profesional (88 partidos), este año el camino está despejado ni Jason Castro y J.R. Towles, cubrieron las expectativas del club. Sin embargo, Quintero es uno de esos ejemplos de que la perseverancia rinde frutos y con seis años dentro de la franquicia recibe la titularidad a sus 31 años y está dispuesto a no entregarla en lo que le resta de carrera.
Debuto en 2003 con los Padres de San Diego, con quienes estuvo hasta 2004 allí su rol fue de suplente y no tuvo una demostración de sus condiciones. Al siguiente año es transferido a Houston y lo demás es historia. La defensa es su carta de presentación, ha retirado al 36% (91-52) en su carrera de ocho años en el Big Show. Su porcentaje de fildeo se ubica en 992.
Miguel Montero se estreno en 2006 con los Diamantes de Arizona, desde su arribo a las mayores, Arizona vio un pelotero con cualidades de líder dentro del club y slugger que sería pieza de su ofensiva.
En 2007 recibe su primera prueba de fuego, pero las lesiones truncan su desempeño, misma situación ocurrió en 2008 y 2009, que es cuando participa en la mayor cantidad de compromisos hasta los momentos (128). El año pasado nuevamente y por cuarta campaña sucesiva las lesiones en sus rodillas y espalda se hicieron presentes limitándolo a 85 encuentros; para este 2011 las cosas parecen ser otras, el criollo sabe que puede ser este el año de su consagración, y para ello se ha sometido a un programa de entrenamientos que pudiera darle frutos está campaña, la cual tendrá el rol de cuarto bate, es decir, será eje ofensivo del club.
De por vida exhibe promedio de 267 con 40 jonrones y 160 producidas. Defensivamente tiene un promedio de 990. Ha retirado al 26% (179-62), de los robadores de base, nada envidiable si tomamos en cuenta que ha mantenido su promedio año tras año. El año pasado tuvo un 31% cifra hasta los momentos más alta de su carrera al retirar 21 corredores de los 68 que le robaron.
Los veteranos
Entre los más veteranos tenemos a Henry Blanco que inicia su campaña 14 en las mayores, su reputación ha sido bien ganada sobretodo en el aspecto defensivo donde se ha ganado elogios de varias organizaciones por donde ha pasado, de hecho aún se recuerda como los Bravos de Atlanta lo adquirieron y Greg Maddux lo selecciono como su receptor personal para suplantar la vacante dejada por otro criollo como fue Eduardo Pérez.
Blanco debuto en 1997 con los Dodgers de Los Ángeles, con los cuales tuvo tres partidos y ninguno de ellos como receptor. Retorna nuevamente en 1999 a las mayores con Colorado donde participo en 88 encuentros, al siguiente año los Cerveceros de Milwaukee lo adquieren y juega los siguientes dos años donde se gano la titularidad en 2001 cuando participo en 104 encuentros (su total más alto hasta entonces); a pesar de sus 210 de promedio, su defensa fue su carta de presentación para ser titular durante esos partidos.
Entre 2002 y 2003 participo con Atlanta como receptor personal de Greg Maddux. En ambas campañas batearía 204 y 199 respectivamente. En 2004 experimento hasta los momentos su mejor año, cuando Minnesota lo adquiere para ser el receptor y mentor de Joe Mauer. De hecho ese año participo en 114 partidos (su mayor cantidad) y fue factor primordial en la obtención del premio Cy Young de Johan Santana. A pesar de sus 206 de promedio, dio 10 jonrones y remolcó 37.
Minnesota quiso extenderle el contrato para el 2005 con opciones reales de ser titular con todo y Joe Mauer, pero el careta decidió ir a la agencia libre y fue con los Cachorros de Chicago (2005-2008) donde ejerció el rol de suplente que ha continuado hasta hoy en 2011.
Blanco tiene de por vida promedio de 227 con 60 jonrones y 265 producidas. Junto a Miguel Cairo son los criollos con más equipos en las mayores.
Defensa que maravilla a los equipos
Blanco quien inicio su carrera como receptor y luego fuera transformado en tercera base, y devuelto a esa posición en 1996 por los californianos, ha ganado adeptos por su manera en conducir a los lanzadores y por su contundente brazo que ha servido para ubicarlo entre los mejores defensa de esa posición.
En el 2000 retiro a 39 de los 75 peloteros que robaron base para un 58% que lo ubicaron como líder en esa categoría, repitiéndolo en 2004 cuando logro 49%. El año pasado con los Mets tuvo un 50%, mientras ha tenido seis campañas más sobre el 40%. De por vida su porcentaje es de 43% (580-249). Y su promedio defensivo se ubica en 994.
Dioner Navarro a sus 27 años intenta regresar por todo lo alto a las mayores, luego de perder la titularidad el año pasado con Tampa por su endeble bateo. Debuto a los 20 años en 2004 con los Yankees de Nueva York, era considerado una promesa en esa posición pero la presencia de Jorge Posada imposibilitaba su estreno.
Estuvo involucrado en el canje múltiple que envió a Randy Johnson a Nueva York, mientras que el criollo iba a los Dodgers donde en temporada y media estuvo luchando junto a Russell Martin por la titularidad de la posición. Es transferido al siguiente año (2006) a Tampa Bay donde en 2007 se gana la titularidad. En 2008 asistió a su único Juego de Estrellas.
Este año retorna a los Dodgers donde será back up de Rod Barajas, pero su corta edad y su disposición en el juego podría colocarlo nuevamente en la titularidad. De por vida exhibe promedio de 249 con 34 jonrones y 180 producidas. Ha mantenido intacta su defensa desde su arribo al Big Show tiene de por vida un 30% de captura de robadores de base y un 990 de fildeo.
Otro que puede recibir el llamado en cualquier momento es Raúl Chávez quien tiene doce años en las mayores, iniciará con los Mets la campaña en las menores pero su defensa podría ascenderlo en un momento a otro.
Francisco Cervelli a sus 25 años está cerca de ser titular en las mayores, los Yankees de Nueva York, organización para la cual debuto en 2008, le brindó el año pasado el chance para jugar a diario debido a la lesión de Jorge Posada, pero a pesar de eso, la presencia de dos prospectos como Austin Romine y Jesús Montero, más la incorporación de Russell Martin le minimizan las opciones, si tomamos en cuenta que durante los entrenamientos se lesiono y estará fuera hasta la segunda mitad de la campaña, por lo que deberá esforzarse por demostrar que es jugador de las mayores y no de las menores.
De por vida tiene promedio de 274 con un cuadrangular y 49 remolcadas. Exhibe un promedio defensivo de 984 y ha retirado al 22% de los que han intentado robarle una base.
Futuro prometedor
Hay otra camada de receptores que aguardan aún por su oportunidad en las mayores, son ellos Maximiliano Ramírez, José Lobaton, Jesús Flores, Robinson Chirinos, Jesús Montero, Guillermo Quiroz, Carlos Maldonado y Héctor Giménez.
Del grupo Flores ya tuvo en su ocasión la oportunidad de ser titular pero las lesiones han mermado su accionar en las mayores, este año la presencia de Wilson Ramos e Iván Rodríguez en Washington lo harán trabajar más para quedarse arriba y ser el back up del equipo.
Maximiliano Ramírez ha aguardado pacientemente su oportunidad de demostrar sus condiciones en las mayores, con los Cachorros de Chicago tendrá su chance en cualquier momento, su versatilidad para jugar como inicialista lo pudiera ayudar a conseguir su cupo en el roster.
José Lobaton será el back up de John Jaso en Tampa, la organización considera que el criollo está listo para demostrar su utilidad y su condición de ambidiestro lo ayuda mucho. Otros que aguardan por su oportunidad de volver son Guillermo Quiroz, Carlos Maldonado y Héctor Giménez quien está dejando un buen sabor de boca con los Dodgers de Los Ángeles.
Finalmente Robinson Chirinos y Jesús Montero pudieran ser los nuevos estrenos este año en las mayores, Chirinos demostró en Tampa que su bate ya es grandeliga y que en un momento a otro el equipo con sede en Florida le brindará el chance de estrenarse.
Jesús Montero es una de las joyas más preciadas de los Yankees de Nueva York, los especialistas consideran que su bate y ofensiva son para exhibirlas todos los días, pero el dilema aún continua si Nueva York le dará el chance o lo cambiará por otras piezas, lo cierto es que su talento es increíble y le deparan un futuro prometedor.
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