El potencial de Jesús Montero ya no podrá ser apreciado por la fanaticada de los Yankees de Nueva York, organización que lo transfirió junto al lanzador Héctor Noesí a los Marineros de Seattle, a cambio de los prometedores lanzadores Michael Pineda y el venezolano José Campos.
El movimiento sorprendió a todos, pues hasta la semana pasada el venezolano figuraba como el bateador designado de la organización a rayas, dada la magnífica actuación que tuvo al ser ascendido en septiembre de 2011.
Sin embargo, fuentes anónimas indicaron que los Yankees consideraron que Montero no es una opción a largo plazo, cerrando de esta forma los insistentes rumores acerca del destino del mejor prospecto de la organización a rayas.
Obviamente el talento de Montero esta allí, su bateo pertenece a las grandes ligas, pero las dudas acerca de su defensa generaron que la organización tomará esta decisión. Decisión que quizás no sorprenda pues en los últimos años, los Yankees han sacrificado parte de sus granjas por conseguir peloteros estelares en la consecución de títulos.
Por ser novato, Montero era probable que no viera acción detrás del plato.
Una oportunidad de oro
Brian Cashman, gerente general de los Yankees y Joe Girardi, manager, aseguraron en las pasadas reuniones invernales, que el venezolano Montero vería más acción detrás del plato durante la temporada 2012.
Ambos aseguraron que el joven receptor necesita seguir su desarrollo detrás del plato y que en algún momento de la campaña asumiría la posición de manera regular.
Por lo cual el puesto de designado, sería de él al inicio de la temporada regular.
El joven carabobeño promedio 308 en ligas menores con 76 vuelacercas y 318 remolcadas. En septiembre recibió el ansiado llamado y en 18 partidos bateo para 328 con cuatro cuadrangulares y 12 carreras remolcadas.
Tal explosión ofensiva del criollo lo colocaba como una pieza apetecible para cambio, Cashman se negó a incluirlo en cualquier paquete, pues Montero tenía números adecuados para convertirse en una estrella en la organización, de hecho lo más cerca que estuvo de ser cambiado fue en julio de 2010, cuando Seattle lo pidió a cambio de Cliff Lee, dicha negociación se cayó al final.
Ahora con Seattle como su nuevo destino, Montero se perfila a una temporada de consagración, con la organización naviera en plena fase de restructuración, el criollo puede explotar sus condiciones y se perfila como el receptor del futuro de este conjunto.
El otro criollo que se vio involucrado en la transacción fue Vicente Campos, lanzador de 19 años que en su primera temporada en Clase A, ponchó a 85 bateadores en 81 entradas con 13 bolas concebida.
Video de Jesús Montero antes del cambio
Video de Jesús Montero antes del cambio
@beisboladentro
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