Conocido
como un trabajador, Gregor Blanco tiene objetivos claro para la temporada 2014
con los Gigantes de San Francisco.
Tras
dos años con el equipo de la bahía y en los que ha acariciado la regularidad,
Blanco se convirtió en una pieza imprescindible el año pasado tras la lesión de
Ángel Pagan, pero su ofensiva sigue siendo una materia que no lo ha consagrado
en las mayores.
San
Francisco reforzó su outfielder con la firma de Michael Morse, quien puede
desempeñarse además en el infield, dando un valor a Bruce Bochy a la hora de
buscar un emergente en el juego.
Si
bien Blanco no se intimida ante la firma, continúa trabajando incansablemente
por demostrar que está listo para jugar todos los días.
Blanco
vive una experiencia similar a la que tuvo Gerardo Parra con los Cascabeles de
Arizona, no estaba entre los regulares, pero fue volviéndose prescindible, eso
lo sabe y espera pulir ciertos aspectos para conseguir la meta.
Por
lo pronto, Bochy lo ve como su cuarto jardinero y su desempeño en las tres
posiciones le abrirá opciones en los episodios finales. Aunque las lesiones son
frecuentes en Morse y Pagan y Hunter Pence son susceptibles, Blanco no desea
ser regular por un imprevisto, sino por méritos propios.
Blanco espera ser titular esta temporada |
Su
máxima cantidad de encuentros fue en 2012, cuando tuvo 141 partidos y fue
regular en la postemporada. En ese entonces, tomo el lugar de Melky Cabrera,
quien fue suspendido por dopaje. El año pasado aprovecho los inconvenientes de
Andrés Torres y Ángel Pagan.
Será
está la temporada de consagración.
@beisboladentro
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